Xabi no se fía de ‘su’ Anfield
Xabi Alonso ha preferido que el Real Madrid se entrene en Valdebebas por miedo a que sean espiados en Anfield
El donostiarra conoce a la perfección los entresijos del estadio del Liverpool
«Es una decisión mía. Preferimos hacerlo en nuestra ciudad deportiva, en nuestro espacio. Así no nos cogen 200 cámaras», respondía Xabi Alonso a la última pregunta de la rueda de prensa posterior a la victoria contra el Valencia. Al entrenador madridista se le cuestionaba sobre el cambio de plan y la decisión de no entrenar en Anfield, escenario del partido, y su respuesta era tan clara como sincera. Y es que sí, 200 cámaras a lo mejor no, pero el vasco, que conoce perfectamente el estadio del Liverpool -donde jugó durante cinco años- y a su gente, tiene claro que no es lo mejor para preparar el duelo hacerlo sobre su césped.
En el Real Madrid aseguran que la decisión de no entrenar en el escenario del partido en la previa de los partidos de Champions no es definitiva, que se irá viendo en el día a día. No obstante, la tendencia dice que será así: que los blancos, a partir de ahora, se ejercitarán en Valdebebas y viajarán por la tarde al país en cuestión. Veremos lo que sucede dentro de unas semanas, cuando tengan que jugar en Atenas contra el Olympiacos. Lo que sí es una realidad es que Xabi no se fía de su Anfield. Especialmente, de su gente.
El vasco sabe perfectamente cómo se las gastan en Liverpool y cómo, aunque el entrenamiento esté abierto solo 15 minutos para la prensa, en los 45 minutos restantes habrá muchos ojos mirando lo que hace el Real Madrid en la ciudad inglesa. Por ello, Xabi Alonso, que es tremendamente celoso de cualquier tipo de filtración, ha optado por esta decisión para el duelo contra los ingleses. Los blancos trabajaron en Valdebebas y, a las 16:00, hora peninsular española, pusieron rumbo a Inglaterra con el trabajo ya hecho.
Los cambios de Xabi
Xabi ha implantado varios cambios en el día a día del Real Madrid desde su llegada, sobre todo en la planificación. Ahora, la semana se prepara tras el partido de Liga y no antes, como se hacía en otras etapas, por ejemplo, en la de Ancelotti. También es cuidadoso a la hora de dar los días libres a sus jugadores. La plantilla tuvo dos días de descanso tras ganar el Clásico, pero antes del partido solo sabían que el martes no se ejercitaban, mientras que el lunes estuvo en el aire hasta la tarde del domingo. Nueva era, nuevos métodos.
También está siendo mucho más cuidadoso que Ancelotti a la hora de dar a conocer las alineaciones. Los jugadores lo saben en la charla previa al encuentro o, como mucho, en la mañana del partido, por lo que, si se filtra, solo han podido ser ellos o alguien del cuerpo técnico. La primera que dio a conocer, en el Mundial de Clubes contra el Al Hilal, llegó antes de lo esperado a la prensa y el donostiarra no se enfadó, pero sí hizo saber a todos que traicionaban a todo el equipo. Nunca más se ha filtrado un once y ya no es necesario que se dé a conocer dos horas antes del encuentro.
Vuelta a casa
El Liverpool moderno no se entiende sin nombres como Steven Gerrard, Jamie Carragher, Rafa Benítez, Fernando Torres y también Xabi Alonso. El exfutbolista español llegó al conjunto red en 2004, fichado por el técnico madrileño desde la Real Sociedad, y, tras una rápida adaptación al fútbol inglés, se convirtió en el metrónomo de aquel equipo vertical y atractivo que conquistó el Viejo Continente.
En cinco temporadas, entre 2004 y 2009, a Xabi Alonso le dio tiempo a entrar en el top 100 de jugadores con más partidos (210) en la historia del club. Y la grada de Anfield siempre recordará y admirará su nombre por su aportación en la final de la Champions en Estambul ante el AC Milan, el 25 de mayo de 2005.
El mediocentro vasco, que siempre destacó por su visión y su facilidad para generar fútbol, además de por un exquisito desplazamiento en largo, fue quien marcó el gol del empate tras errar su propio penalti, en aquella remontada mítica que pasó de 0-3 a 3-3 antes de la gloria en los penaltis para levantar la Champions.
El ex centrocampista también participó en la eliminatoria de octavos de final de la Champions 2008-09 entre Liverpool y Real Madrid, en la que el equipo inglés pasó por encima del madridista, endosándole un 4-0 en Anfield, en la noche del famoso «chorreo», para un marcador global de 5-0 en el cruce.
Años más tarde, en el verano de 2009, Alonso puso rumbo, tras ganarse el respeto de la grada de The Kop, al Real Madrid, club con el que también se proclamó campeón de Europa en la final de Lisboa de 2014. Para la historia quedará su carrera por la banda de Da Luz con el gol de Sergio Ramos en el minuto 93 de un partido que el vasco se perdió por sanción.
Pero Anfield nunca lo volvió a ver defendiendo otros colores, ya que ni como jugador del Real Madrid ni del Bayern , club en el que militó entre 2014 y 2017, se enfrentó a su querido Liverpool. Tras tres años en el conjunto alemán, anunció su retirada como profesional y dio el salto a los banquillos.
El técnico vasco sí visitó Anfield la pasada temporada con el Bayer Leverkusen como entrenador, sufriendo un contundente 4-0 en la fase de liga de la máxima competición continental a nivel de clubes. Sin embargo, el partido de este martes será mucho más especial, ya que ahora defiende los colores del segundo equipo con el que se proclamó campeón de Europa y, junto a la Real Sociedad y el propio Liverpool, uno de sus hogares en el fútbol. Le espera una noche cargada de emociones y simbolismo, con una afición red que homenajeará a uno de los suyos.
El círculo se cierra. Xabi Alonso tendrá la oportunidad de sentir el cariño de una grada que lo admira y que lo vio aprender a ganar y competir. Anfield recibe de nuevo a uno de los arquitectos del Liverpool moderno desde la conquista de Estambul.