La retirada de Varane: de futbolista a educador de cantera
El ex del Real Madrid tiene una nueva vida en el Como
El francés fue apercibido con pasamontañas en un partido del Lens
Nico Paz sigue impresionando bajo las órdenes de Fábregas
Raphael Varane ha iniciado una nueva etapa en su vida: educador infantil en la cantera del Como. A sus 31 años, el ex central del Real Madrid asume un nuevo cargo al lado de Cesc Fábregas y Nico Paz. En el equipo italiano, su experiencia como jugador fue breve y accidentada, disputando solo 19 minutos antes de sufrir su última lesión en un partido de Copa de Italia contra la Sampdoria. Esta nueva desgracia en la rodilla marcó el final de su carrera como jugador, llevándole a anunciar su retirada con su característica discreción.
A pesar de haber colgado las botas, Varane sigue afiliado al mundo del balón, aunque ‘detrás de las cámaras’. En el Como, el ex zaguero asume un rol como consultor para el desarrollo de la cantera. El francés se centra en la formación integral de jóvenes talentos.
Su trabajo combina educación académica, liderazgo y una preparación completa para los talentos de mañana. Además de tener esas nuevas papeletas, Varane también tiene mano en la directiva del club, ya que es miembro del consejo de administración de la entidad italiana.
«He acumulado mucha experiencia en el fútbol y uno de los valores más importantes que he aprendido es la resiliencia. Creo que es fundamental tener fortaleza mental y confianza, pero es igualmente importante compartir y comunicar, tanto dentro del club como con la comunidad que lo rodea. Sólo así se podrá construir una identidad fuerte», relataba Varane tras cumplir nuevas funciones en el Como.
La trayectoria de Varane
Su trayectoria como jugador ha sido extraordinaria, incluyendo un Mundial con Francia en 2018 y cuatro Champions League con el Real Madrid (2014-2016, 2017 y 2018). Sin embargo, las lesiones han marcado significativamente su carrera, acumulando 27 lesiones que le hicieron perderse 153 partidos, equivalente a 683 días de baja.
Su llegada al fútbol profesional fue meteórica, siendo uno de los grandes fichajes de Mourinho en el Real Madrid, avalado por Zidane, a pesar de sus problemas en las rodillas. Los madridistas pagaron solo 10 millones por él, y años más tarde el Manchester United desembolsaría 50 millones para ficharlo. Tras su etapa en Inglaterra, que incluyó una FA Cup y una Copa de la Liga, decidió dar un último paso en su carrera fichando por el Como.
Infiltrado en el Lens-PSG
Su pasión por el fútbol sigue intacta, como lo demuestra su reciente aparición en el estadio Bollaert-Delelis, donde acudió de incógnito para ver un partido de Copa de Francia entre su equipo formativo, el Lens, y el PSG. A pesar de intentar pasar desapercibido con gorro y pasamontañas, los aficionados y las cámaras lo reconocieron. El partido, que enfrentaba a su querido club formador contra el Paris Saint-Germain en los 32° de final, terminó con victoria del equipo parisino en la tanda de penaltis, tras un empate a uno en el tiempo reglamentario.
Su conexión con el Lens sigue siendo especial, pues fue allí donde debutó siendo adolescente, antes de que su talento llamara la atención del Real Madrid. De hecho, siempre mantuvo la ilusión de regresar y retirarse en el club que le vio crecer, aunque finalmente no pudo cumplir ese sueño. Ahora, padre de tres hijos, Varane emprende una nueva etapa en el Como, acompañando a otra leyenda como Thierry Henry en el proyecto del club italiano.