Camavinga se machaca en busca de un milagro mundial
El francés siguió con su recuperación en Dubái
Se rompió el tendón del aductor izquierdo a finales de abril
Su presencia en el Mundial de Clubes está descartada... ¿pero y si no?
Eduardo Camavinga se machaca a pesar de estar en vacaciones. El mediocampista del Real Madrid estuvo en Dubái la semana pasada para recargar las pilas, pero también para trabajar en su recuperación. El pasado 23 de abril, el francés sufrió de «una rotura completa del tendón del aductor izquierdo», según el propio comunicado de la entidad blanca.
En Instagram, Cama volvió a dar noticia de él. En Dubái, el centrocampista compartió fotografías de sus entrenamientos, y el galo parece estar en una gran forma. «Con muchas ganas de volver», escribió el ex del Stade Rennais en su publicación. La presencia de Eduardo Camavinga en el próximo Mundial de Clubes está prácticamente descartada. No obstante, el ‘6’ del Real Madrid quiere acortar plazos y quiere buscar el milagro.
Las lesiones se cebaron con Camavinga
El centrocampista francés atraviesa una campaña complicada. Este curso, el futbolista ha sufrido cuatro lesiones musculares y ha cometido algunos fallos que podría haber evitado, por lo que la fortuna no ha estado de su lado últimamente. A pesar de estos contratiempos, en los encuentros anteriores a su última lesión, Eduardo Camavinga mostró señales de volver a su mejor nivel. Lo hizo con un golazo ante el Alavés.
Pero también en su actitud y en su sacrificio. Su papel como mediocentro fue esencial para Carlo Ancelotti, ya que su calidad y capacidad para adaptarse a distintas posiciones hacen que sea un recurso muy valioso para los merengues. De hecho, en la semifinal de Copa del Rey ante la Real Sociedad, Eduardo desempeño el papel de lateral izquierdo. Ahora, con la llegada de Xabi Alonso, Cama quiere demostrar al nuevo técnico que tiene su sitio en la plantilla y que el Real Madrid no tiene que ir a por otro medio.
Un proyecto de futuro
El fútbol tiene sus altibajos. Hay temporadas mejores y otras más complicadas. A pesar de sufrir un año muy duro, Eduardo Camavinga mantiene la calma y confía en que pronto recuperará su mejor versión sobre el césped del Santiago Bernabéu. Se dice muy pronto, pero el francés finaliza ahora su cuarta temporada en Chamartín. Con solo 22 años y un contrato vigente hasta 2029, sigue representando una apuesta de futuro para el Real Madrid.
Una apuesta que, si se revisan los datos, ya ha dado frutos. Camavinga llegó al club en 2021 por 31 millones de euros y ya ha conquistado dos Champions. El año pasado fue titular en la final de Wembley frente al Borussia Dortmund, sumando su segunda Champions con el equipo y siendo pieza clave en la consecución de la 15ª Copa de Europa y el título de Liga.
La situación de Camavinga refleja la enorme presión que existe en el Real Madrid. En un club donde solo vale ganar, cualquier error puede resultar costoso. Por eso, Eduardo seguirá esforzándose al máximo para seguir creciendo como futbolista y responder a la confianza que el club ha depositado en él. Su futuro en el equipo dependerá en gran parte de su capacidad para superar estos retos y demostrar que está a la altura de las exigencias de la entidad madridista.