Benzema puso la guinda a su excelente carrera futbolística en el Théâtre du Châtelet de París, donde recibió de manos de Zinedine Zidane su primer Balón de Oro. La noche, como casi todo lo que toca el capitán del Real Madrid, estuvo marcada por el buen ambiente que se generó en una platea que rompió en aplausos cuando se develó un secreto a voces, que no era otro que el delantero era el ganador. Justo después de que Zizou, su mentor futbolístico, pronunciase su nombre, Karim se levantó a recoger la pelota dorada y Florentino Pérez, su principal apoyo desde que llegó al Bernabéu, sacaba el móvil para inmortalizar ese momento. Por primera vez, un futbolista criado bajo el ADN blanco ganaba este premio.
Benzema se convertía en el octavo jugador del Real Madrid en ganar el Balón de Oro. Di Stéfano, Kopa, Figo, Ronaldo, Cannavaro, Cristiano Ronaldo y Luka Modric lo habían hecho antes, pero ninguno lo ha hecho como Karim. El francés aterrizó en el estadio Santiago Bernabéu un lejano 9 de julio de 2009 a la edad de 21 años. Por delante tenía una carrera que construir. Y así lo ha hecho en el club de las 14 Copas de Europa.
Durante estos 14 años, Benzema ha vivido épocas de todo tipo. Sufrió con José Mourinho, empezó a deslumbrar en la primera etapa de Ancelotti, brilló con Zidane y se ha convertido en el mejor del mundo en el retorno entrenador italiano. En este tiempo, también ha pasado de ser el mejor actor secundario y socio de Cristiano Ronaldo, a convertirse en el referente de la plantilla. Quién le iba a decir a él que iba a cerrar una temporada siendo el máximo goleador de la Liga y con 15 dianas en Champions.
Benzema ha madurado y se ha hecho futbolista en el Real Madrid. Y mucha culpa de que hace unas horas tomase un vuelo con dirección a la capital de España con el Balón de Oro entre sus brazos la tiene Florentino Pérez. Por ello, tras la gala le quiso reconocer todo el apoyo dado: “Le tengo mucho respeto porque siempre ha estado en mi barco. Estuvo en momentos muy difíciles conmigo. También estuvo con mis padres en mi casa de Lyon para ficharme para el Madrid. Sé que está feliz por mí. Me pone orgulloso de mi trabajo porque siempre me dijo que un día ganaría el Balón de Oro”.
