Barcelona – Real Madrid: el partido del siglo… si nos dejan
Barcelona y Real Madrid jugarán en el Camp Nou el Clásico más politizado de la historia. Ambos equipos llegan al duelo en lo más alto y empatados a puntos.
Barcelona – Real Madrid: última hora del Clásico en directo
Barcelona y Real Madrid se preparan para jugar el enésimo partido del siglo. Los dos transatlánticos del fútbol español miden sus fuerzas en el Camp Nou a partir de las 20:00 horas con las emociones a flor de piel. Ambos llegan al encuentro de los encuentros empatados a puntos en lo más alto de la clasificación y en un momento de forma espectacular que les confirma como dos serios candidatos a aspirar a todo tanto en el territorio nacional como en el continente.
Pero también se miden en el que será el Clásico más politizado de la historia. Un duelo que se debería haber jugado el pasado 26 de octubre y que una panda de radicales no lo permitieron. Una fiesta del fútbol que se ha aguado por culpa de aquellos que quieren romper el país y sembrar el miedo mientras campan a sus anchas sin recibir mayor castigo. Esos que han conseguido cambiar los planes de los ciudadanos de a pie y de dos equipos, especialmente de uno que poca o nada responsabilidad tiene en todo esto, a base de protestas de todo menos pacíficas.
Pase lo que pase en el Camp Nou a partir de las 20 horas, este para el resto de los restos será el Clásico que se llevó por delante un tsunami en octubre y que ahora, con el panorama político igual de convulso, se tiene que jugar rodeado de un sinfín de medidas de seguridad. También será el Barcelona – Real Madrid en el que ambos equipos, enemigos eternos, compartirán las horas previas al encuentro en el mismo hotel junto con los árbitros. Las fuerzas y cuerpos de seguridad han decidido que los dos conjuntos se hospeden en el hotel Sofía, situado a escasos metros del estadio azulgrana, para tener que vigilar un solo convoy, lo que facilitará notablemente que los protagonistas estén en el campo a tiempo y hora, chafando el plan de aquellos que quiere manifestarse en los aledaños del estadio.
Este no es un Clásico más. Es el Clásico que ha evidenciado, más si cabe, que el problema catalán se fue de las manos hace tiempo. Que ha dejado a una directiva, como es la presidida por Josep Maria Bartomeu, atada de pies y manos pidiendo a aquellos a los que no han frenado nunca los pies que se manifiesten, pero de forma pacífica, sin realizar ningún acto que pueda pagar muy caro el Barcelona. Y a un club, como es el Real Madrid, que sin comerlo ni beberlo se ha visto en medio de una polémica tremendamente incómoda en la que ha encontrado pocos aliados, a pesar de ser claramente la víctima de todo esto junto a aquellos aficionados que sólo quieren disfrutar del fútbol.
Hablemos de fútbol
Y hablando al final de lo que realmente importa, que no es otra cosa que el fútbol, en el Camp Nou se van a dar cita dos de los mejores equipos del mundo con la intención de regalar a todos un partido que haga olvidar por un momento lo que ha acontecido en los meses, semanas, días y horas previos.
Por un lado, el Barça de Ernesto Valverde llega al duelo en un momento dulce. Con Messi brillando, Suárez marcando y Griezmann integrándose. También tiene las carencias que lleva arrastrando desde hace varias temporadas, desde que dejó de tener el mejor centro del campo del planeta, pero con la dinamita que tiene arriba posee argumentos de sobra para poder plantar cara a cualquiera. Incluso a un Real Madrid que se ha reencontrado en los últimos tiempos.
Zidane, una vez más, ha tenido razón y ha dado con la tecla. El galo no podrá contar con Hazard, lesionado, ni con Marcelo, también convaleciente, pero sí podrá apostar por un centro del campo envidiable gracias a la fuerza de Casemiro, el físico de Valverde y la calidad de Kroos. El cuarto hombre puede ser Isco, pura magia, o Luka Modric, que todavía tiene cosas que decir en este tipo de partidos. Y arriba, Benzema formando pareja probablemente con Bale, desaparecido tantas veces como clave en los momentos de la verdad. El galés siempre podrá decir que sale en todas las fotos más importantes del club en el último lustro.
Todos los ingredientes están listos para poder disfrutar de un auténtico partidazo. Un duelo que es la envidia del mundo y que nosotros podemos tener en nuestro país, España, como mínimo dos veces al año. La afición quiere gozar con un nuevo partido del siglo… si nos dejan.