Liga: Atlético 5-2 Real Madrid

Así destrozó Simeone a Xabi Alonso

El Cholo sorprendió con Sorloth de titular y los suyos crearon constantes superioridades

El tolosarra se precipitó con Bellingham en el once y no reforzó el costado izquierdo por el que Carrera se desangró

Cuando Alberola Rojas decretó el final del derbi, Simeone fue saludando uno a uno a todos sus jugadores, que andaban ya congregados junto al fondo sur del estadio. Saltos, vítores, aplausos… Contrastaba con la imagen de Xabi Alonso y los suyos, que enfilaron el túnel de vestuarios desperdigados, cada uno por su lado. Las secuencias son el reflejo de lo que acababa de pasar durante más de una hora y media sobre el césped del Metropolitano.

Se evidenciaban las realidades de los dos entrenadores, de uno, Simeone, al que le ha salido su plan al detalle y otro, Xabi Alonso, que resbaló con su esquema y vio como la libreta de su homónimo lo castigó con puño de hierro. Sorprendió el tolosarra con un Bellingham carente de ritmo competitivo de inicio, envidó Simeone con Sorloth como titular. El noruego, que regresaba a la convocatoria tras haber sido expulsado ante el Mallorca, fue la apuesta de Simeone para revolucionar el entramado de Xabi Alonso.

La victoria del Cholo gravitó en torno al nórdico. Su presencia fijó los centrales y mostró unas carencias que hasta el momento no habían salido a relucir. Huijsen y Militao. Por bajo, con balones al espacio, como la primera jugada que salvó el defensa brasileño cuando se barruntaba el gol, pero especialmente por alto. Su planta, instalada entre los dos centrales, inclinó el ataque rojiblanco hacia los centros laterales y el peligro constante. Cada balón aéreo por el área del Real Madrid rezumaba a riesgo.

Pero la incursión de Sorloth en el once condicionó todo. Los mencionados centrales quedaron fijados y tuvieron que contar, en varias ocasiones, con la ayuda de Tchouameni que se descolgaba del centro del campo. Posteriormente, ya con el Real Madrid a remolque, el francés ejerció como central. Hasta entonces, su retroceso dio metros y espacio a los jugadores colchoneros, que se movieron con mayor libertad en tres cuartos de campo. Sobre todo Julián Álvarez.

El argentino actuó entre bambalinas. Se involucró en la fase final de la jugada con el 90% de precisión en el pase y constantes caídas a bandas, ergo, Koke y Barrios quedaron más libres de responsabilidades para subir la posición. La caída de Julián a los costados volcó el juego por los carriles que atropellaron al Real Madrid. Simeone armó los laterales con trabajo y punzante para desgracia de un Xabi Alonso que dejó muy expuesto a Carreras. El lateral se vio desbordado por Giuliano y Llorente.

Ambos se intercambiaban los papeles para dejar apagado el contador de duelos ganador por el lateral. No ganó ninguno. Fue repercutiendo en su confianza y desembocó en errores con balón. Tampoco acompañó Vinicius, que escatimó en demasía los esfuerzos defensivos para ayudar a su lateral que siempre estuvo en inferioridad. Xabi Alonso no reforzó ese costado y los de Simeone siguieron martilleando.

Lo último en Real Madrid

Últimas noticias