Rafa Nadal supera su trauma con Fognini

Rafa Nadal guardaba el nombre de Fabio Fognini en su particular lista negra. El italiano le había ganado hasta en tres ocasiones en apenas dos años y en superficies tan dispares como la tierra batida o pista dura. La última derrota ante el tenista de San Remo había dejado muy tocado a Rafa. Fue en el US Open, donde le remontó dos sets favorables al español.

En Flushing Meadows, Rafa Nadal tocó fondo. No sabía que tenía que hacer para volver a la élite. Había perdido toda la confianza en su golpeo de bola y su poderío físico estaba lejos de su mejor momento. El español, tras semanas de reflexión junto a su tío Toni, reencontró el camino al éxito en la parte final de la temporada.

Fognini se reencontraba en los cuartos de final del Conde de Godó con un Rafa Nadal en trayectoria claramente ascendente tras ganar el Masters 1000 de Montecarlo. El manacorense entró en el partido sólido y no seguro de lo que tenía que hacer. Apenas cometió errores y su revés se erigió en su arma más efectiva para ponerse en el marcador con un 4-0 favorable. Fognini hizo un conato de reacción rompiendo el saque del español –sigue sin estar en su mejor momento en este aspecto–, pero Rafa respondió con su tercer break de la manga para cerrar el marcador en 6-2.

Todo hacía indicar que Nadal estaba pletórico e iba camino de dar un correctivo a uno de los rivales que más se aprovechó de sus momentos de debilidad. Con 2-0 y 40-15 en el marcador en el saque de Rafa, Fognini despertó de su siesta para traer la inquietud al club de tenis de Barcelona. El italiano, a base de winners y sartenazos, movía a Rafa de un lado a otro de la pista sin que éste pudiese hacer nada.

Fognini logró un 4-0 de parcial en esa segunda manga, pero Rafa sabía que tarde o temprano llegaría su oportunidad, tal y como confesó después del partido: «Fabio tiene momentos de increíble inspiración donde parece imparable, pero también comete errores y sabía que en ese momento tengo que aprovecharlos». Dicho y hecho, Rafa puso el 6-5 a su favor y 0-40 en cuanto Fognini flaqueó. 

El italiano, sin embargo, es un tipo capaz de todo y se revolvió para remontar esas tres bolas de partido y forzar el tie-break. Nadal no se inquietó lo más mínimo. «Sabía lo que tenía que hacer para poder dominarle», aseguró. Ganó por 7-1 en la muerte súbita firmando varios winners y desquiciando a un Fognini que levantó el dedo en señal de respeto. Rafa Nadal ha vuelto.