Por qué no hay prórroga y la Supercopa de Europa se puede decidir en penaltis

La final de la Supercopa de Europa 2023, que mide al Manchester City y al Sevilla en Atenas (Grecia), cuenta con una gran novedad que puede convertirse en importante si el encuentro acaba en empate después de los 90 minutos reglamentarios y el tiempo de descuento. La UEFA ha tomado la decisión, de cara a la edición de 2023, que en caso de empate al término del tiempo reglamentario no se dispute una prórroga y vayamos directamente a los penaltis. Te explicamos por qué.

El motivo principal está en las fechas en las que se disputa la Supercopa de Europa, en pleno inicio de temporada y con muchos jugadores susceptibles de contar con una lesión en caso de acumular demasiados minutos de juego. La Supercopa, que mide al campeón de la Champions League, el Manchester City, y al vencedor de la Europa League, el Sevilla, se disputa entre semana, en un miércoles posterior a una jornada de Premier League y Liga Santander y anterior a otra nueva cita de competición doméstica.

La UEFA ha decidido intervenir y quitar la prórroga en un partido que en más de una ocasión se ha marchado a este tiempo extra que amplía en 30 minutos el encuentro en condiciones normales. En su sustitución, en lugar de un gol de oro o un gol de plata, que fueron alternativas en competiciones internacionales tiempo atrás, se ha optado porque el partido que mide al Manchester City y al Sevilla, dado el caso, se marche directamente a la tanda de penaltis.

El reglamento UEFA y la prórroga

La decisión de la UEFA de cambiar el reglamento de cara a la Supercopa de Europa 2023 se ve reflejado en las siguientes líneas. Según el artículo 12.01 sobre la competición que mide a los campeones de Champions League y Europa League, «en caso de que el resultado sea de empate al final del tiempo reglamentario, no habrá prórroga al final del encuentro. La tanda de penaltis determinará el ganador», se puede leer. Además, el artículo 12.02 habla de que la tanda de penaltis será según el procedimiento de normas de la IFAB, con una tanda de cinco lanzamientos y el colegiado pudiendo apoyarse en sus auxiliares para comprobar que el tanteo es correcto.