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EL NORUEGO YA ES INTOCABLE EN EL HEERENVEEN

Odegaard sigue creciendo y ya es indiscutible en Holanda

Martin Odegaard ya es importante en la plantilla del Heerenveen. La joven perla del Real Madrid salió en el pasado mercado invernal con el objetivo de continuar con su progresión, que se había visto algo estancada tras temporada y media en Segunda B. El jugador llegó al conjunto madridista con la etiqueta de crack. Media Europa se peleaba por él con apenas 16 años. Y es que el noruego causaba sensación. A esa edad ya era internacional absoluto con su selección.

El Madrid le amarró, asegurándose de que su progresión continuara y para ello le dejó en el filial. Tras dos intentos frustados de ascenso, se consideró que la mejor opción era darle una salida, a poder ser a Primera división, para que se fogueara y siguiera creciendo.

Las cosas no empezaron muy bien en el Heerenveen, donde no contó con un papel primordial durante sus primeros meses. Sin embargo, esta temporada ya es un fijo en el once. No hay quien le mueva del terreno de juego. Odegaard tiene todos los minutos que incluso en el Castilla no llegó a tener.

Su marcha en el mercado invernal le ha hecho madurar y mejorar. Competir en la Eredivisie holandesa le está haciendo crecer y ha pasado de tener ciertos minutos a lo largo de la temporada pasada, a jugar todo en lo que va de esta. Tres partidos, sí, pero los tres al completo.

Y todo ello, en un equipo que aún no sabe qué es perder este curso. Dos empates y una victoria acumula el conjunto neerlandés en este arranque del campeonato liguero. Mientras tanto, el escandinavo va cogiendo ritmo y mejorando día a día, para lograr despuntar y que el Madrid le reclame el próximo verano.

La estrategia seguida por el Real Madrid en los últimos años le está dando resultado. El conjunto madridista acostumbra a mandar jugadoras a equipos de media tabla de ligas importantes del continente, para hacerlos crecer. Esta fórmula tuvo sus frutos en Carvajal -que fue pionero-, en Lucas, Asensio, Llorente o Vallejo. Todos ellos, hoy en la primera plantilla.

Con Odegaard se confió en vigilarle desde cerca. Para poder realizarle un seguimiento más exhausto, se prefirió que creciera en casa. El jugador estaba a caballo entre el primer equipo y el segundo, entrenándose con los mayores y jugando con el filial en Segunda B.

Sin embargo, se reconsideró la situación pensando que mejoraría en una liga de mayor categoría. Una opción que también se estimó desde la federación noruega. Con el fin de no ponerle sobre el foco más de lo debido, dándole un papel impropio de su edad, Odegaard juega ahora con la sub-21 de su país, con la que marcó un golazo el pasado viernes ante Kosovo.

El jugador del Real Madrid ha conseguido encontrar el rumbo de su futuro y por fin da muestras de la calidad que hicieron que los blancos le ficharan adelantándose a los grandes del continente. Han tenido que pasar unos meses, pero finalmente la joven perla ha destapado sus armas y está dando credenciales al conjunto madridista para creer en que aún puede jugar en en el Bernabéu.