El Nápoles blinda a Fabián: vale 100 millones

En medio de la búsqueda de un hombre para reforzar el centro del campo con un rol de mucho peso, la dirección deportiva del Real Madrid ha recuperado el nombre de Fabián Ruiz. El centrocampista andaluz está deslumbrando con la sub-21 y ello ha devuelto el interés al conjunto madridista, que sondea su fichaje con la consciencia de que el Nápoles, club propietario del jugador, será un hueso muy duro en caso de decidirse por negociar.

El cuadro napolitano considera intransferible a Fabián, llegado el pasado verano procedente del Betis y previo pago de su cláusula de rescisión de 30 millones de euros. El gran rendimiento del jugador, unido a la salida de un emblema de la entidad como Marek Hamsik, hacen que el Nápoles le haya blindado ante la posibilidad de que algún gran club europeo quiera hacerse con sus servicios.

A aquellos que preguntaron por Fabián en las semanas previas a la disputa del Europeo se les explicó la imposibilidad de negociar, poniendo un precio de 100 euros para iniciar conversaciones por el jugador. Ahora, con el valor de mercado inflado debido a su rol de líder de España sub-21 –junto a Ceballos–, las cantidades presumiblemente habrán aumentando, apartando al jugador de la práctica totalidad de los clubes interesados.

Plan C del Real Madrid

El Real Madrid tiene en Fabián a su plan C, después de la obsesión de Zidane, Paul Pogba, y Christian Eriksen. Como ya adelantó el director de OKDIARIO, Eduardo Inda, en el club blanco gusta y mucho el jugador de 23 años, pero en estos momentos no es prioridad y las innumerables complicaciones que pondrá el Nápoles, con De Laurentiis a la cabeza, tampoco colaboran para llegar a un hipotético acuerdo.

Los informes que maneja el Madrid sobre el canterano del Betis son inmejorables y su progresión se ha confirmado después de dar un importante salto con la llegada al Nápoles, club con el que ha ido aumentando de protagonismo de forma progresiva. Primero fue en una posición antinatural para él como la de jugador de banda izquierda para más tarde coger las riendas del centro del campo en un doble pivote, posición en la que Ancelotti tiene pensado alinearle para que se haga con las llaves de la gestión del equipo.