Los Hispanos defienden su trono ante los vikingos

Ahí están de nuevo los Hispanos en una final. Comandados por Jordi Ribera, España consigue meterse por cuarto Europeo consecutivo en el partido decisivo en el que se decidirá quién se lleva el oro y quién la plata. Nuestros guerreros tendrán delante a una Suecia a la que ya se impusieron en la primera fase del torneo… y también en la final de 2018, la que supuso el primer título continental para el balonmano nacional.

Junto a los nombres de Rafa Nadal, Fernando Alonso, Severiano Ballesteros, Manolo Santana, Alexia Putellas, Marc Márquez, Ángel Nieto, etc. ya están escritos en letras doradas los miembros de la selección de fútbol que nos hicieron vibrar con ese Eurocopa-Mundial-Eurocopa y también la de baloncesto, obviamente. Junto a ellos, pase lo que pase en la final, estará también esta generación de los Hispanos, no siempre tan reconocidos como se merecen, pero que han llevado el nombre de España al más alto nivel en el balonmano mundial durante la última década.

Desde antes de la pandemia se avecinaba ese cambio generacional que ha comenzado después de que en los Juegos Olímpicos de Tokio los Entrerríos, Morros y compañía lograran el bronce. En este Europeo había bastantes caras nuevas y una de las grandes sensaciones del torneo, como es Agustín Casado, está a las órdenes de Jordi Ribera. La veteranía de los que todavía continúan y las ganas de los recién llegados, sumada a la ayuda de Dani Sarmiento, que no dudó a la hora de acudir a la ayuda de los Hispanos cuando hubo dos casos positivos por Covid, han sido suficiente para que España vuelva, por cuarto año consecutivo, a una final de este torneo.

Superada a la Dinamarca que nos buscó y que se fue con el rabo entre las piernas tras un partidazo de los Hispanos -sobre todo de Aleix Gómez- ahora sólo queda Suecia para poder mantener el reinado en Europa que iniciamos en 2018, precisamente, ante el mismo rival. Aquel día de hace cuatro años, en Croacia, España lograba su primer Europeo, título que revalidó dos años después ante los croatas. Nadie ha sido capaz de sacar a los hombres de Jordi Ribera del trono al que se han aferrado y que querrán seguir manteniendo en Budapest.

España y Suecia coincidieron en la primera ronda del campeonato y los Hispanos salieron vencedores (32-28). En Budapest se vuelven a ver las caras y Ángel Fernández ya ha advertido de que es muy difícil ganar dos veces a un mismo equipo en un torneo. Un mensaje muy claro de que esto es una final y tienen que estar enchufados desde el primer minuto hasta el último, como bien ha explicado también Jordi Ribera. 

Con esa pareja de porteros que es la mejor dupla del mundo. Con esa mezcla de veteranía y de juventud. Con la experiencia de unos y con las ganas de repetir hazañas de los más nuevos. Con los valores que este equipo han sabido mostrar durante todos estos años. Con la garra y con la calidad. Con la fuerza de unos y la clase de otros. Con todo esto y mucho más, los Hispanos volverán a pelear por la medalla dorada fieles a sus principios con todo un país detrás que los apoyarán hasta el último suspiro.