La gran depresión de Griezmann

El delantero francés del Atlético de Madrid suma ya dos meses y medio sin ver puerta en el campeonato liguero. Griezmann se ha quedado estancado en los seis tantos que consiguió durante las siete primeras jornadas.

Uno de los males que está azotando al Atleti es la falta de gol. Sobre todo, la de su hombre estrella. Antoine Griezmann está en plena sequía goleadora y su equipo lo nota. El galo no cesa en su intento de volver a la senda de gol, pero intento tras intento, el tan ansiado tanto no llega.

El francés inició la temporada con unos buenos números. Se situó entre los máximos goleadores del campeonato hasta que su racha goleadora se acabó. Griezmann se fue descolgando de la parte alta de la tabla de máximos artilleros del campeonato, pero quiere cambiar su suerte en el año que está a punto de comenzar.

Griezmann iba camino de mejorar sus mejores registros anotadores con el Atlético, pero esta serie de partidos sin marcar podría costarle no superar el reto. Es normal no verle sonreír sobre el campo. La ansiedad por volver a mojar le está pasando factura. En ningún partido deja de intentar volver a la senda del gol, pero después del error siempre llega esa cara de insatisfacción.

En las goleadas ante Celta y Sporting, el francés firmó un doblete. Después, han sido Deportivo y Valencia los equipos que le han sufrido. A partir de ahí, su pólvora se ha mojado en el campeonato liguero.

Otra cara en Champions

Pero esa sequía goleadora es en el campeonato liguero, porque en Champions, Antoine suma tres dianas. Tres goles muy importantes en el plano personal y colectivo. Su doblete ante el Rostov fue vital para que los rojiblancos pasaran como líderes de grupo. Además, con su gol al PSV igualó –con 12 tantos– a Luis Aragonés como máximo goleador de la historia del Atlético en la máxima competición europea.