El Gobierno amenaza a Rafael Louzán con intervenir la Federación si se «ratifica» su condena por prevaricación
El Gobierno de Pedro Sánchez se lanza a por Rafael Louzán, presidente de la Federación Española de Fútbol
Pilar Alegría amenaza con destituirle y "convocar elecciones" en la RFEF si se "ratifica la condena" por prevaricación
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El Gobierno de Pedro Sánchez se lanza a por Rafael Louzán, presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF). Pilar Alegría, ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, ha amenazado a Louzán con destituirle y «convocar elecciones» en la RFEF si se «ratifica la condena» por prevaricación al máximo dirigente del fútbol español.
Semanas después de que Rafael Louzán fuera elegido de forma mayoritaria por los asambleístas del fútbol español, decisión que no gustó nada al Gobierno de España, ahora la ministra amenaza al ente federativo con intervenir si la próxima semana el Tribunal Supremo ratifica la condena por prevaricación que recae sobre Louzán.
El dirigente del fútbol español, que hasta llegar a la presidencia de la Federación era el presidente de la territorial gallega, fue condenado por prevaricación en un caso pasado sin relación con su presidencia en la RFEF, pero tiene pendiente que el Supremo decida sobre su recurso. La vista oral se espera para el próximo 5 de febrero y ahora el Gobierno dice que si se le ratifica la condena, actuarán contra el propio Louzán y con ello contra la Federación.
«Nosotros vamos a esperar a esa vista oral que se va a celebrar el 5 de febrero y, si se ratifica esa condena de siete años por prevaricación, nosotros actuaremos con arreglo a la Ley del Deporte y habrá que volver a convocar elecciones a la Federación», ha dicho la ministra Pilar Alegría, que tiene entre sus competencias las políticas de deporte.
Cabe recordar que a FIFA y UEFA no le gustan nada las injerencias gubernamentales, tanto que ya hace unos meses amenazó al fútbol español con dejarle fuera de competiciones internacionales si se mantenían esas decisiones de órganos dependientes del Gobierno. Tras las últimas amenazas, se acabó acelerando el proceso de elecciones en la RFEF, saliendo elegido Louzán por deseo de los asambleístas, que a su vez representan a todos los estamentos del fútbol español.
Así, el Gobierno de España se agarra a la Ley del Deporte para actuar contra Rafael Louzán si el Supremo ratifica su condena y además argumenta que es que da una mala imagen al fútbol español, como sus antecesores. «Llevamos unos años trasladando una imagen desde luego nada constructiva. Todos tenemos muy fresco en la memoria lo que ha pasado con los anteriores presidentes de la federación», añadió Pilar Alegría en una entrevista en la Cadena SER.
El caso por el que está pendiente Rafael Louzán de la decisión del Supremo es un presunto aso de prevaricación cuando era presidente de la Diputación Provincial de Pontevedra y concedió una subvención de casi 87.000 euros para remodelar el estadio de Moraña. Es decir, no tiene nada que ver con su actual presidencia de la RFEF.