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El club honra la memoria del que fue su jugador

El detallazo del Betis que emociona al fútbol: rinde homenaje a Miki Roqué en la final de la Conference

Esta camiseta ha sido un símbolo de lucha y esperanza para la afición bética desde que perdió la vida en 2012

El gesto del Betis en la final de la Conference League es una muestra más de su compromiso con la memoria del

Sigue en directo la final de la Conference entre el Betis y el Chelsea

  • Jesús Buitrago
  • Redactor de deportes. Apasionado de los viajes con miles de kilómetros de experiencia a mis espaldas tras recorrer los cinco continentes y más de 100 países.

El Betis ha querido rendir un emotivo homenaje a Miki Roqué la noche de este miércoles en la final de la Conference League que los verdiblancos disputan en Breslavia ante el Chelsea. Y es que el conjunto andaluz ha colocado una camiseta del eterno número ’26’ en el vestuario del equipo que dirige Manuel Pellegrini como muestra de respeto y cariño hacia el jugador, quien falleció en 2012 a la temprana edad de 23 años.

A pesar de su valiente lucha, falleció en 2012, dejando una huella imborrable en el corazón de los béticos. Desde entonces, el club ha mantenido vivo su recuerdo, retirando su dorsal ’26’ y dedicando un minuto de aplausos en cada partido en su honor.

El gesto del Betis en la final de la Conference es una muestra más de su compromiso con la memoria de Roqué y con los valores que él representaba: lucha, sacrificio y amor por los colores. Este detalle en el vestuario ha conmovido a la afición y ha sido un recordatorio de que, aunque el tiempo pase, el recuerdo del que fuera su jugador sigue vivo en cada rincón del club.

Este homenaje a Roqué llega en un momento especial, ya que el Betis se encuentra disputando una final europea, un logro que muchos consideran un tributo a la memoria de Miki. La afición bética, siempre fiel y apasionada, ha mostrado su apoyo al equipo y ha recordado a su eterno ’26’ en cada partido, en cada cántico y en cada gesto.

En resumen, el Betis no ha querido olvidarse de Miki Roqué en el partido más importante de la historia verdiblanca al poner su camiseta en el vestuario como símbolo de respeto y cariño. Este gesto refleja los valores del club y el amor de la afición por un jugador que, aunque ya no está, sigue siendo una parte fundamental de la historia del Betis.