El Atlético vuelve a la ‘vieja’ normalidad

El Atlético de Madrid ha puesto el modo Champions y ya no hay quien le pare. Ante el Levante lograron un nuevo triunfo por la mínima (0-1) que les afianza en los puestos de Liga de Campeones. Los pupilos de Simeone parecen haber vuelto a su ‘vieja’ normalidad, esa en la que acostumbraba a ganar los partidos marcando tan sólo un gol. Enfrente tenían a un equipo que también llegaba invicto tras el parón y con su objetivo (la salvación) prácticamente conseguido, pero los de Simeone no les dieron opción de hacer su juego.

Desde el minuto uno salieron con la idea de dominar el partido e intentar hacer un gol pronto. A punto estuvo de hacerlo Marcos Llorente en la primera jugada del partido, pero Aitor despejó su centro chut. No fue mas que un aviso de lo que le esperaba al conjunto de Paco López. Los primeros minutos fueron un asedio continuo a la meta levantinista. Entre Carrasco y Diego Costa les darían un nuevo susto tras un disparo del belga que el meta no atajó bien y casi aprovecha el hispanobrasileño, el más listo de la clase, para hacer el primero.

Se salvaron por segunda vez pero no se salvarían una tercera. Diez minutos después llegaría el gol del Atlético gracias a una genialidad de Marcos Llorente. El centrocampista reconvertido en atacante hizo un gran movimiento de delantero para deshacerse de su marcador, cedió atrás y tras tocar en las piernas de los centrales termina dando en Diego Costa para acabar en el fondo de la portería.

La jugada del ex madridista reafirma el gran descubrimiento de Simeone con su nueva posición. El gol era cuestión de tiempo, el Levante no pasaba de medio campo mientras el Atlético bombardeaba su portería una y otra vez. Cuando los granotas se acercaban al área de Oblak, los rojiblancos robaban y salían rápido al contraataque con Llorente y Diego Costa que les permitían salir en velocidad y plantarse cerca de la meta de Aitor con pocos pases.

Al descanso, lo mejor para el Levante era el resultado. El Atlético estaba dominando con claridad y no les permitía montar alguna contra como les gusta. Los granotas estaban desaparecidos gracias al buen trabajo de los pupilos de Simeone que perfectamente pudieron emprender el camino de los vestuarios con un resultado más amplio.

El Atlético no remata y acaba sufriendo

En la reanudación el partido siguió el mismo guión. De hecho, a los dos minutos de arrancar el segundo tiempo le anularon un gol a Thomas por fuera de juego claro de Diego Costa. Tras el susto, el Levante dio un paso adelante de la mano de Enis Bardhi pero no conseguía inquietar a Jan Oblak. El Atleti había cedido algo de terreno pero se mostraba muy firme en defensa, manteniendo el bloque en todo momento y no permitiéndoles acercarse a los dominios del meta esloveno.

El resultado seguía siendo muy corto y el Cholo decidió mover el banquillo con tres cambios de una tacada. Lo mismo hizo Paco López. Ambos entrenadores sacaron tres nuevos futbolistas en busca de refrescar al equipo. Al Atlético le estaba costando cerrar el partido y el Levante se acercaba cada vez más, aunque seguía sin poner en apuros al guardameta colchonero. Tuvo ocasiones para sentenciar pero no estaban acertados en la finalización.

Simeone se desesperaba. Veía como su equipo llegaba una y otra vez pero no remataba el partido. Ya no tenían el dominio del primer tiempo y comenzaban a sufrir, fruto de los acercamientos de los de Paco López y la ventaja tan corta que tenían. A 12 minutos del final Mayoral paró los corazones de todos los atléticos con un cabezazo que se marchó rozando el palo. Por suerte no tuvieron que lamentar las ocasiones falladas y el viejo Atlético del unocerismo volvió a sumar tres puntos importantes que le afianzan en la tercera plaza tras el empate del Sevilla.