El orden de los factores sí altera el resultado: confirmado qué debes conectar antes, el cargador o móvil

Cargar el móvil es algo que hacemos de forma casi automática, pero a menudo no pensamos en los pequeños detalles que pueden influir en la durabilidad de la batería y, por ende, en la vida útil de nuestro teléfono. Una de las preguntas que surge cuando se trata de cargar el móvil es sobre el orden correcto para conectar el cargador: ¿Deberíamos conectar primero el cargador al teléfono o al enchufe? Aunque pueda parecer una cuestión menor, la realidad es que el orden puede influir en la salud de la batería a largo plazo.

Con el avance tecnológico, muchos teléfonos modernos ahora incluyen sistemas de carga inteligente que optimizan la forma en que se carga la batería. Estas tecnologías permiten retrasar la carga hasta que sea necesario, lo que evita que el teléfono se cargue innecesariamente cuando ya ha alcanzado el nivel deseado. De esta manera, se reduce el estrés sobre la batería y se alarga su vida útil. Los sistemas de carga inteligente también permiten una carga más eficiente, adaptando la velocidad y la cantidad de energía que recibe el teléfono según las necesidades del dispositivo.

¿Qué orden es el mejor para conectar el cargador?

La recomendación de los expertos es clara: lo mejor es conectar primero el cargador a la toma de corriente y luego al móvil. La razón detrás de este consejo está relacionada con la estabilidad de la energía que llega al dispositivo.

Conectar primero el cargador al enchufe asegura que la corriente eléctrica fluya sin interrupciones hacia el cargador antes de que entre en contacto con el teléfono. De esta manera, evitamos que el teléfono reciba picos de tensión que pueden dañar la batería. Estos picos, aunque pequeños, pueden ir acumulándose con el tiempo y, a largo plazo, afectar negativamente la salud de la batería. Es importante recordar que las baterías de litio, que son las más comunes en los teléfonos móviles modernos, son sensibles a cambios bruscos en el suministro de energía.

Una vez que la carga del dispositivo esté completa, es recomendable desenchufar primero el teléfono y luego desconectar el cargador de la toma de corriente. Este orden es importante porque cuando desconectamos primero el cargador de la corriente, podemos evitar el riesgo de generar una corriente inversa, lo que podría dañar la batería. Al desconectar el teléfono primero, es posible que haya un pequeño flujo de electricidad que dañe la batería con el tiempo.

Calidad del cargador

Por otro lado, la calidad del cargador es un factor clave en la salud de la batería a largo plazo. Un cargador de baja calidad o uno que no sea compatible con las especificaciones de nuestro teléfono puede tener efectos perjudiciales en la carga del dispositivo. Los cargadores baratos o de mala calidad pueden proporcionar una corriente inestable, lo que puede provocar que el teléfono se cargue de más lentamente o incluso que la batería se sobrecaliente.

Por este motivo, siempre es recomendable utilizar cargadores originales o certificados que hayan sido diseñados específicamente para nuestro teléfono. Un cargador adecuado garantiza que la corriente eléctrica que llega a nuestro dispositivo sea la correcta, lo que no sólo protege la batería, sino que también mejora la velocidad de carga y la eficiencia general del proceso.

Consejos adicionales

Si bien el orden correcto de conexión es un detalle importante, existen otras recomendaciones que también pueden contribuir a prolongar la vida útil de la batería del móvil.

Las baterías de litio funcionan mejor cuando se mantienen entre un 20% y un 80% de carga. Aunque no es necesario obsesionarse con la cifra exacta, lo ideal es evitar cargar el teléfono al 100% todo el tiempo. De hecho, los expertos sugieren que mantener la carga del teléfono entre estos niveles ayuda a reducir el estrés en la batería, lo que contribuye a una mayor durabilidad y eficiencia.

Muchas veces, solemos dejar el teléfono conectado a la corriente durante la noche, pero esto puede generar un sobrecalentamiento y reducir la vida útil de la batería. Los teléfonos modernos están diseñados para detener la carga una vez que alcanzan el 100%, pero esto no significa que no haya efectos secundarios de dejar el teléfono cargando durante largos períodos. Para proteger la batería, es mejor desconectar el cargador una vez que el teléfono haya alcanzado el nivel de carga deseado.

El fenómeno conocido como «sobrecarga» ocurre cuando el cargador sigue suministrando energía al teléfono incluso después de que haya alcanzado su carga completa. Esto puede generar una tensión adicional en la batería y contribuir al sobrecalentamiento.

En definitiva, aunque cargar el teléfono móvil es algo que hacemos de manera rutinaria, es importante tener en cuenta ciertos detalles que pueden mejorar la vida útil de la batería. Aunque el orden en el que conectamos el cargador y el teléfono es una cuestión aparentemente trivial, puede marcar la diferencia a largo plazo en la salud de la batería.