La cruzada de Kellogg’s contra la masturbación: así empezó todo

Kellogg’s es una multinacional estadounidense cuyo origen se remonta al año 1906. Will Keith Kellogg trabajaba en el Sanatorio de Battle Creek, y fundó su compañía basándose en los hábitos de alimentación de los Adventistas del Séptimo Día. El éxito fue rotundo, y los pedidos se dispararon en poco tiempo. Lo que muchas personas desconocen sobre el origen de Kellogg’s es que la compañía mantuvo una fuerte cruzada contra la masturbación.

En el siglo XIX se creía que la masturbación causaba diferentes males, como la demencia. En Estados Unidos había multitud de campañas publicitarias que advertían a los jóvenes de lo peligroso que era masturbarse para la salud.

El doctor John Harvey Kellogg iba un paso más allá, y decía que cualquier práctica sexual tenía consecuencias nefastas para el cuerpo, la mente y el alma. Él fue una de los que más luchó contra la masturbación, a la que atribuía un gran número de efectos: acné, epilepsia, palpitaciones, corrupción moral, rigidez de las articulaciones…

John Harvey Kellogg estaba convencido de que una buena alimentación podía evitar que una persona quisiera masturbarse. Después de inventar una máquina de enemas que no tuvo ningún éxito, creó los Corn Flakes. Eran una comida muy inofensiva y suave, que, según él, podía apaciguar los impulsos sexuales de los más jóvenes. En un principio, se negó a añadirles azúcar ya que creía que este ingrediente podría resultar excitante.

Su hermano, Will Keith Kellogg, tenía otra opinión al respecto, y fundó su propia empresa, Kellogg’s. Luego, le compró a John Harvey Kellogg la patente de los Corn Flakes, y la compañía empezó poco a poco a crecer hasta convertirse en lo que es en la actualidad. Tras una gran campaña publicitaria, los Corn Flakes se convirtieron en un alimento muy popular en EE.UU y, más adelante, en todo el mundo.

Es interesante cómo una guerra contra la masturbación en el siglo XIX dio lugar a los Corn Flakes de Kellogg’s. El propio John Harvey Kellogg seguía un régimen muy estricto sin cafeína, alcohol ni grasas para evitar el deseo sexual. Su alimentación se basaba en verduras, arroz, avena y cebada principalmente.

Tal es la popularidad que tienen los cereales en la actualidad que incluso hay un día dedicado a ellos. El Día del Cereal se celebra el 7 de marzo. Los españoles ingieren de media 50 boles de cereales al año y los estadounidenses 160.