El Gobierno de Sánchez deja a Formentera sin chiringuitos playeros al rechazar la concesión de servicios

El Gobierno de Pedro Sánchez deja a Formentera sin chiringuitos de playa al denegar la concesión de servicios para la ocupación de 857 metros cuadrados de dominio público marítimo terrestre con destino a estas instalaciones del litoral en varios tramos de costa de diferentes arenales de esta isla pitiusa.

Si bien el Consell de Formentera presidido por la socialista Ana Juan ha presentado alegaciones a esta decisión de Demarcación de Costas, ente dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, el PP ya ha advertido en un comunicado de que la administración insular «llega tarde como siempre».

A este respecto el presidente del PP de Formentera, José Alcaraz, ha denunciado «la estrategia del Gobierno de Pedro Sánchez de acabar con toda la actividad humana en el litoral de Baleares», después de la denegación de la concesión de los servicios de playa en Formentera, alertando a la vez de que con esta decisión «se juega con el pan de decenas de trabajadores y empresarios».

El PP apoya las alegaciones presentadas por el Consell contra la denegación de Costas, ya que «tal y como exponen los servicios jurídicos y técnicos del propio Consell, las actividades para las que se solicita la concesión no suponen un riesgo para la integridad de la costa pero lamenta que éstas llegan tarde.

«La izquierda juega con el pan de decenas de trabajadores y empresarios que han vivido de esto durante los últimos años y de otros muchos que se presentaban por primera vez al concurso y que a día de hoy siguen sin saber qué pasará con sus ofertas, por la desidia de unos y el empeño de destruir la actividad económica en el litoral de otros», critica Alcaraz, señalando a su vez que «es del todo perjudicial para nuestra economía que una concesión solicitada en 2021 esté aún sin resolver, cuando estamos a punto de entrar en 2023».

«Se vuelve a socavar la seguridad jurídica de las decenas de licitadores que se presentaron al concurso iniciado por el Consell de Formentera en noviembre de 2021, y que en estos momentos, aún no tienen ni la adjudicación ni el rechazo definitivo, una prueba irrefutable de la errática gestión del Consell y de su gobierno más caro de la historia», remachó Alcaraz.