El porcentaje de jóvenes ninis en Andalucía se sitúa por primera vez por debajo del 15%

Las medidas impulsadas por la Junta de Juanma Moreno han logrado que, por vez primera, el porcentaje de jóvenes andaluces entre los 15 y 29 años que ni estudian ni trabajan baje del 15%, la mitad que hace una década. En 2013, el porcentaje era del 30% y, diez años después, se sitúa en el 14,7%. En el último lustro (2018-2023), y con la llegada del PP andaluz al Gobierno de la Junta, el porcentaje de jóvenes ninis ha pasado del 20,1% al citado 14,7%, lo que supone una caída 5,4 puntos.

La Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional ha destacado que estos datos «confirman la mejora de la oferta educativa en la comunidad, donde cada vez más jóvenes deciden continuar con su formación al tener más opciones y de mayor calidad». «De esta forma, tienen más oportunidades de encontrar un empleo», han señalado fuentes del departamento que dirige Patricia del Pozo.

En Andalucía, 59.492 jóvenes menores de 25 años se encuentran en paro, según datos del Ministerio de Empleo difundidos el pasado mes de enero.

Los jóvenes andaluces encuentran, sobre todo en la oferta de Formación Profesional (FP), un «aliciente» para seguir formándose, lo que ha tenido una traslación en las tasas de abandono escolar de los últimos cinco años, según señalan fuentes de la Consejería a Europa Press. Andalucía ha consolidado un índice por debajo del 17%, con un descenso de más de cinco puntos respecto a 2018.

Desde el departamento de Del Pozo enfatizan la apuesta por la Formación Profesional como una «medida muy eficaz para luchar contra el paro juvenil, lacra histórica de la sociedad andaluza». Además, aseguran, contribuye a reducir el abandono y el fracaso escolar al cualificar a la población y «aumenta la competitividad de las empresas e impulsa el desarrollo económico de una provincia, de una región y de un país».

En el presente curso se han ofertado 165.859 plazas de nuevo ingreso de FP, de las que 7.360 son de nueva creación (casi 48.000 nuevas en el acumulado desde 2019) y 21.828 son de Dual, con la participación de más de 6.000 empresas en esta modalidad.

Para la Administración educativa, uno de los avances «más significativos» en estos últimos años es la reducción en más de 16 puntos de la tasa de estudiantes que no lograban una plaza en la FP a pesar «del aumento de la demanda». Así, la tasa ha pasado del 35% de 2018 al 18,8% en el curso escolar 23-24. Igualmente, la Junta pone el acento en el incremento del profesorado: el sistema educativo cuenta con 10.166 docentes de FP -2.397 más que en 2018-, lo que significa que el 35% del incremento total -casi 7.000 docentes inyectados al sistema- han ido a reforzar estas enseñanzas, según las cifras facilitadas por la Consejería.

La oferta suma ahora 255 nuevos ciclos y cursos de especialización hasta alcanzar un total de 3.676 ciclos que se imparten en más de 700 centros. En este sentido, la Consejería ha apostado por la implantación de ciclos formativos vinculados a sectores «estratégicos» con el «propósito de elevar la tasa de inserción laboral del alumnado titulado» y ha modificado parte de la oferta existente para su «correcta adecuación a las necesidades del mercado laboral actual» mediante cambios de perfiles.

En esta línea, el ciclo de Energía Renovables se imparte en 13 centros educativos de Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla, con un total de 365 alumnos. El ciclo de Gestión del Agua, enmarcado en la familia de Energía y Agua, se imparte en tres centros de Jaén, Málaga y Sevilla, con 59 alumnos. Otra formación «consolidada» en la FP es la familia de Industrias Extractivas, con dos ciclos: el de Piedra Natural y el de Excavaciones y Sondeos, que se imparten en Huelva y Almería, con 23 y 39 alumnos, respectivamente.