Andalucía

Okupas de un chalet en Sevilla destrozan el coche de la vecina que lleva años denunciando su violencia e insalubridad

Violentos okupas que llevan casi una década en una vivienda de Umbrete (Sevilla) han destrozado el coche de una vecina que llevaba los mismos años denunciándoles por sus actos delictivos, su violencia y sus condiciones insalubres de vida. Ahora, esta vecina vive escondida, y no quiere ni hablar, ni mostrar los destrozos por miedo a más represalias. 

Según explican los vecinos, basta con pasar por delante de las viviendas para dar fe del mal olor que sale de estas casas okupadas desde hace ya una década. Se trata de una promoción de una docena de viviendas que se construyó en pleno ‘boom’ inmobiliario, que ha quedado completamente abandonada y que es propiedad de un banco.

Fue en 2011 cuando se produjo la primera okupación de estas viviendas. El primero, según explican los vecinos, se trataba de «un tipo violento, un delincuente reconocido que acababa de salir de la cárcel, un mafiosillo que traficaba con droga, muy conflictivo y muy problemático».

«Este señor llego a Umbrete, y nadie hizo nada. Se le dejó estar», denuncian. «Al darse cuenta del chollo, se dedicó a okupar las 10 o 15 casas pareadas, con su patio delante y detrás, para alquilarlas, sobre todo a personas de nacionalidad rumana», continúan quienes conocen el caso.

Cuando este hombre ya tenía las viviendas okupadas, los vecinos de la zona se empezaron a movilizar y, con el tiempo, consiguieron echarles a casi todos. Este hombre, que tenía «dos perros violentos», vio las orejas al lobo, y antes, de ser detenido por tráfico de droga, se fue. Sin embargo, dejó abandonados a sus dos perros peligrosos, que se terminaron «comiendo el uno al otro prácticamente», según denuncian.

Es entonces cuando la Policía toma conciencia y empieza a forzar la expulsión de las personas que vivían en las nueve casas que estaban okupadas, de las que ya solo quedan dos. Les cortaron la luz y el agua, e incluso quitaron las farolas para que no pudieran engancharla…

Pero estas dos viviendas aún okupadas aún siguen ahí. Adquirieron generadores de electricidad y, con total impunidad, siguen viviendo en las casas okupadas. Los vecinos, quizás, no dirían nada de no ser por la insalubridad, la violencia y el «olor repugnante» que sale de ellas.

Vox

Uno de estos okupas, intentó okupar recientemente otra de las casas. Pero los vecinos se movilizaron y lo evitaron de nuevo. Sin embargo, como represalia, a una de las vecinas que lideraban las denuncias contra ellos le destrozaron el coche. «Le han rayado todo el coche, le han roto los retrovisores… se lo han destrozado», cuenta a OKDIARIO Rafael García Ortiz, Portavoz de Vox en la Diputación Provincial de Sevilla.

Este viernes, una nueva protesta contra los violentos okupas por el destrozo del coche de la citada vecina acaparó dos horas de la tarde, y contó con la presencia de García Ortiz, en nombre de Vox: «Estuvimos ahí un par de horas, llegó la Policía, y estaba todo el mundo muy indignado». «La Policía dice que va a ser bastante difícil echarles, porque están muy consolidados ahí, tienen niños que van al colegio del pueblo y todo. Pero la insalubridad que tienen ahí… Recientemente, degollaron a un carnero y tiraron las tripas a la calle», explica Ortiz.

Sea como fuere, lo cierto es que los violentos okupas siguen viviendo con total impunidad en ‘su casa’ de Umbrete (Sevilla), destrozan el vehículo de quien denuncia, precisamente, sus malos hábitos y condiciones insalubres, y llevan ya casi una década así.