¡Enseña democracia en la ONU!…Ja ja ja

Jamás, desde el inicio de la democracia, un jefe de gobierno de España estuvo más auto acorralado producto de su propia deriva personal y política. En su huida permanente se ha vuelto a subir al falcon (el hombre que dormía y come en el avión presidencial por cuenta del contribuyente) se ha ido hasta Nueva York para oficiar en Naciones Unidas como primer ejecutivo de la nación española.

Su panegírico democrático en la magna asamblea anual de las naciones del mundo (incluidas las que tienen a sus ciudadanos en calidad de súbditos) es la autorreivindicación de un dirigente europeo que combate sin desfallecer por la permanencia y el avance de la democracia global. Ya dejó sentencia el clásico de aquello tan sonoro «dime de qué presumes y te diré de lo que careces». El aserto le viene como anillo al dedo al tambaleante presidente del Gobierno. Esto es, alardea de todo lo que no hace.

Podría haberles dicho a los invitados de la Asamblea General de la ONU, por ejemplo, lo que a continuación se escribe.

-Que llegó a la Jefatura del Gobierno de la cuarta potencia europea mediante una moción de censura fake, es decir, que su candidatura tuvo la apoyatura de un párrafo que luego fue declarado ilegal y suprimido por el pleno de las Salas de lo Penal de la Audiencia Nacional y del Tribunal Supremo.

-Que su primer Gobierno se vio trufado de corrupción desde el primer momento hasta el último.

-Que mintió descaradamente a los ciudadanos (los que le votaron y los que no) al hacer todo lo contrario de lo que prometiö: “No podría dormir si pactara con Podemos (extrema izquierda) e hicieron descansar la gobernabilidad con nacionalistas e independentistas…”

-Que a lo largo de seis años de mandato ha colocado a amiguetes y hooligans en instituciones claves del Estado en un intento de tener el control absoluto de todo el poder institucional y político.

-Que desde el primer momento ha utilizado con fruición los bienes públicos en beneficio propio: vacaciones, conciertos, viajes familiares, etc… en un descarado abuso de poder.

-Que los medios públicos de información (RTVE y EFE) bajo su mandato no resisten una pasada por la decencia, ni los mínimos códigos ético/políticos.

-Que prometió mano dura ante cualquier irregularidad en materia de corrupción y resulta que tenía a su alrededor dos investigados por la justicia (esposa y Hermano) que se aprovecharon de su relación con el. A cambio, persigue desde la Presidencia del Gobierno al juez que persigue los delitos.

-Que llenándose la boca de «transparencia», sus gobiernos son los más opacos de más de cuarenta años de democracia.

-Que su palabra vale tanto que ni siquiera puede salir a la calle.

-Que ha entregado el patrimonio común de los españoles a unos golpistas irredentos que buscan dinamitar el Estado que les cobija y les permite vivir opíparamente (caso de Pons en el Banco de España).

Las anotaciones anteriormente expuestas son algunas muestras de lo que debería haber dicho en la ONU. Sin embargo, tuvo sus santos bemoles de hablar de «ética».

¡Sánchez, el magnífico!     

PD.: Sinceramente, como he escrito en este mismo papel digital varias veces, nos enteramos de la misa a la media acerca de lo que ha ocurrido durante los últimos seis en el epicentro del Poder Ejecutivo de la nación española. Los sobresaltos mayores llegarán cuando tengan que recoger su colchón a horcajadas.