BBVA sólo reduce ocho décimas su exposición a actividades intensivas en emisiones con respecto a 2022

BBVA ha publicado sus resultados en términos de descarbonización y emisiones con respecto a su cartera de su financiación, en los que refleja avances en los pasos dados con los objetivos que ha definido para 2030.

La entidad informa que cerró 2023 con «relevantes avances en términos de descarbonización de su cartera de financiación», destacando que  «hubo mejoras en la consecución de los planes en sectores clave para los que se definieron objetivos a 2030», destacando una reducción del 24% en las emisiones del sector petróleo y gas.

A diciembre de 2023, el 80% de la cartera de financiación de BBVA en los sectores con altas emisiones corresponde a clientes que gestionan activamente su transición, según el último informe TCFD, publicado por la entidad.

Quinto informe

La compañía ha publicado los avances de su plan de transición en el quinto informe que la entidad presenta, basado en la metodología establecida por el Grupo de Trabajo de Divulgaciones Financieras sobre el Clima (TCFD, en sus siglas en inglés).

En él se recogen los progresos en el modelo de gobierno, estrategia, gestión del riesgo y métricas relacionadas con el cambio climático. La hoja de ruta actualizada aparece en el informe, establece para este 2024 el «seguir trabajando para establecer objetivos de descarbonización para el resto de sectores intensivos en emisiones CO₂».

Entre estos sectores se fijan en el aluminio, los bienes raíces comerciales y residenciales y la agricultura, «de acuerdo a las metas y objetivos de la NZBA». Por la tanto, el banco está a casi cinco años de cumplir sus objetivos de descarbonización, según su roadmap.

Neutros en emisiones

La entidad da importancia a que «cerró 2023 con una exposición total a actividades intensivas en emisiones y sensibles al riesgo de transición del 5,9% del total de la exposición del grupo, lo que supone una reducción de ocho décimas con respecto al año anterior». En el informe se recogen los progresos en el modelo de gobierno, estrategia, gestión del riesgo y métricas relacionadas con el cambio climático.

«Nuestra meta es ser neutros en emisiones de carbono en 2050, incluyendo tanto las emisiones propias como las emisiones financiadas de nuestros clientes», ha destacado el presidente del BBVA, Carlos Torres.

El banco también ha desglosado la reducción de emisiones financiadas por sectores. Respecto al sector de petróleo y gas, se han reducido las emisiones un 24% respecto al año base (2021). El 61% de esta cartera de clientes gestionan activamente su transición y BBVA ya no financia directamente nuevos proyectos relacionados con exploración, perforación o extracción.

Electricidad y movilidad

Respecto al sector de generación de electricidad, se ha reducido las emisiones un 24% respecto a su año base (2020), como consecuencia de un aumento del 34% de proyectos de energías renovables, así como una mejora del ‘mix’ de la cartera y una gestión proactiva. El 86% de los clientes en este sector gestionan activamente su transición.

En movilidad, la intensidad de emisiones del BBVA ha caído un 16% respecto a 2020, gracias a la penetración del vehículo eléctrico y a sobre ponderar a los clientes que gestionan activamente la transición, que ya son la totalidad de clientes.

En lo que se refiere al acero, la reducción de intensidad ha sido menor, con una caída del 7% frente a 2020. «La cartera de acero ha mostrado mejor comportamiento que el mercado debido al peso de la financiación de hornos de arco eléctrico, de naturaleza mucho menos intensiva que los altos hornos», explica BBVA. De su lado, en el sector del cemento, BBVA ha visto elevarse la intensidad un 2% respecto a 2020 por la mejora de calidad de los datos.

Carbón térmico

La cartera de carbón ha disminuido un 9% respecto a 2022, debido a una menor exposición a actividades relacionadas con el carbón a medida que vence la financiación a los clientes. El objetivo es suprimir su exposición a actividades relacionadas con el carbón térmico en 2030 en países desarrollados y en 2040 globalmente.

La intensidad de emisiones de la cartera de aviación sube un 1% respecto al año base 2022, aunque se mantiene por debajo de la media del mercado global. La variación se debe a un cambio de mix de la cartera que se espera que se recupere a lo largo de 2024.

«BBVA continúa trabajando con sus clientes en el diseño y ejecución de estrategias de transición acordes a la madurez de esta industria», subraya la entidad financiera.