Agricultores locales piden acabar con la especulación y el expolio del agua en los acuíferos

• Antonio Quilis Sanz @AntonioQuilis
• Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.
• • 04/09/2024 06:00
  • Actualizado: 04/09/2024 06:00

El problema de la gestión del agua como un recurso fundamental para los agricultores y ganaderos significa para muchas familias una lucha continua contra la especulación y el robo de este preciado oro líquido que les quita el pan y repercute en el medio natural.

En este contexto, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) del Altiplano de Granada ha señalado que el sector no va «a parar hasta que las administraciones dejen de mirar para otro lado y tomen cartas».

Expolio de recursos

En el centro de sus reivindicaciones está el acabar «con el expolio de los acuíferos de Huéscar y protejan el riego de 400 hectáreas de explotaciones» locales en este entorno del norte de la provincia granadina.

En la base de este asunto está la proliferación de los cultivos intensivos por parte de empresas «que llegan de fuera», un modelo que también se replica en otros puntos de España, que profundiza en la herida de las pequeñas y medianas explotaciones que ya sufren el cambio climático y la sequía.

Defensa del último acuífero

La responsable de COAG en el Altiplano de Granada, Clara Torreblanca, ha agradecido al millar de personas que el sábado pasado participaron en la manifestación convocada por la Comunidad de Regantes de Fuencaliente en defensa del manantial del mismo nombre, «el último acuífero de la comarca de Huéscar», con el apoyo del Ayuntamiento oscense.

Bajo el lema «¡Por una agricultura y ganadería social, familiar y profesional!», los participantes se manifestaron contra los pozos sin control que están secando el manantial de Fuencaliente, Huéscar.

Defensa del agua

Desde COAG destacan que las explotaciones locales «responden a un modelo social y profesional de agricultura que revierte en el territorio, ya que dinamiza el medio rural, generando riqueza y desarrollo sostenible, fijando la población y cuidando el medioambiente».

Para COAG Altiplano de Granada, el apoyo mostrado por los vecinos de Huéscar, Galera y sus alrededores ha supuesto «una motivación añadida en la lucha por la defensa del agua que es vida para la comarca», han indicado desde la organización de agricultores.

Regadíos intensivos

«Se acabó el robo del agua del acuífero a través de pozos por parte de especuladores», ha indicado Torreblanca, en referencia a «empresas de fuera que sólo vienen a explotar nuestros recursos naturales, comprando terrenos de secano y convirtiéndolas en regadíos intensivos, a costa de vaciar acuíferos impunemente, robando el agua subterránea que es vital para nuestra agricultura, motor socioeconómico de nuestra tierra».

De hecho, la denuncia por parte de los agricultores se están secando casi todos los nacimientos de agua de la comarca, así como mermando de forma vertiginosa otros, como es el caso del manantial de Fuencaliente, el cual ha pasado de tener un caudal de 300 litros por segundo a no llegar a los 90.

Por todo ello, COAG Altiplano «no va a cejar en su empeño en dar la batalla en defensa del agua y la agricultura profesional y social, exigiendo responsabilidades a las administraciones y soluciones definitivas que acaben con el expolio de los bienes públicos de la comarca».

Vigilancia y control

Los regantes de Húescar se manifestaron este pasado sábado contra la sobreexplotación de los acuíferos de la zona y solicitaron a las administraciones que «vigilen y controlen a los grandes empresarios» que «están vaciando los acuíferos y sustrayendo agua de los manantiales, hasta el punto de que quedarnos sin agua».

Así lo expusieron desde la Comunidad de Regantes de Fuencaliente en declaraciones a Europa Press, quienes promovieron la manifestación desde el manantial Fuencaliente hacia la carretera que une Cúllar con Caravaca de la Cruz (Murcia).

A su vez, el Ayuntamiento de Huéscar paralizó el pasado martes las obras de una empresa que hacía un sondeo de aguas para riego de almendros en el entorno del manantial de Fuencaliente tras detectar incumplimiento de algunos de los requisitos contemplados en la licencia que le había concedido, lo cual se puso en conocimiento de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y de la Junta de Andalucía.