Contenido
- 0.1 La frase de 7 palabras que sirve para concienciar a un niño que pide muchos regalos en Navidad, según los psicólogos
- 0.2 Qué significa que una persona odie la Navidad: los rasgos de las personas Grinch, según la psicología
- 0.3 Los temas de conversación que siempre sacan las personas con habilidades sociales bajas, según la psicología
- 1 Estimulación facial con agua fría: el microhábito que calma el sistema nervioso en pocos segundos
- 2 Otros microhábitos para cuidar la salud mental y la memoria
En la vida cotidiana, los niveles de estrés se disparan con facilidad, y muchas personas recurren a técnicas conocidas como contar hasta diez para recuperar la calma. Sin embargo, una alternativa sorprendentemente sencilla y rápida permite reducir la tensión en apenas pocos segundos, actuando directamente sobre el sistema nervioso.
Esta práctica forma parte de una serie de microhábitos saludables propuestos por una especialista española en Medicina y Ciencias del Deporte, diseñados para ser breves, sostenibles y respaldados por la ciencia.
Estimulación facial con agua fría: el microhábito que calma el sistema nervioso en pocos segundos
La doctora Beatriz Crespo Ruiz, autora del libro Microhábitos Saludables, advierte en declaraciones para OKDIARIO, que los grandes cambios suelen fallar porque «saturan al cerebro».
Por ello, propone microhábitos de menos de dos minutos que, según la evidencia en neurociencia y epigenética, pueden activar o desactivar genes relacionados con la inflamación, el envejecimiento o la regulación emocional.
Uno de los gestos más accesibles y efectivos descritos por la doctora es la estimulación facial con agua fría. Esta técnica se puede realizar al llegar a casa tras un día intenso o al finalizar una llamada complicada. El procedimiento consiste en humedecer una toalla o salpicar las mejillas y la frente con agua fresca, asegurándose de que no esté helada.
Mientras se realiza la estimulación, es fundamental respirar únicamente por la nariz. En «pocos segundos», explica Crespo Ruiz, es posible notar cómo el pulso disminuye y la mente se despeja, un efecto que refleja el cambio de marcha del sistema nervioso.
Este microhábito encaja perfectamente dentro del concepto de intervenciones mínimas: gestos cortos, fáciles de aplicar y capaces de reprogramar positivamente la biología del bienestar.
Otros microhábitos para cuidar la salud mental y la memoria
Beatriz Crespo propone otros 3 microhábitos sencillos para mejorar tu salud mental. Estos son los destacados por esta experta:
- Frota tus manos hasta generar calor y colócalas sobre tus ojos cerrados: esta técnica, conocida como palming en yoga, activa zonas del cerebro relacionadas con la regulación emocional y el bienestar, según estudios de neurociencia del profesor Edmund Rolls publicados en Neuron. En apenas 30 segundos, se puede experimentar mayor tranquilidad, concentración y presencia mental.
- Presiona suavemente el lóbulo de tus orejas con movimientos circulares: esta práctica estimula una rama del nervio vago, esencial para controlar la respuesta al estrés. Investigaciones del Dr. Brian Badran, publicadas en Brain Stimulation, indican que la estimulación auricular activa el sistema parasimpático, ayudando a disminuir la ansiedad y promoviendo un equilibrio emocional inmediato.
- Golpecitos con los nudillos en la planta de los pies: activa terminaciones nerviosas conectadas con todo el cuerpo. Estudios en pacientes con ansiedad, como los publicados en Complementary Therapies in Clinical Practice, demuestran que este gesto mejora la circulación, incrementa la energía corporal y contribuye a reducir el estrés. Es ideal para quienes han permanecido sentados por largos periodos o necesitan un reset rápido.
Cada microhábito activa genes reparadores y reduce los del estrés, mostrando que pequeños gestos diarios transforman la biología sin esfuerzo ni sacrificios.






