Contenido
- 0.1 Ni tristes ni hospitalarios: así es como ven los madrileños a los gallegos, según un estudio psicológico
- 0.2 Ni leer ni cocinar: el ‘hobby’ que recomiendan los expertos a los mayores de 65 para tener la mente activa
- 0.3 Qué significa apartar la vista y mirar hacia abajo cuando te hablan, según la psicología
- 1 Los beneficios cognitivos de hablar solo y en voz alta
Si alguna vez puedes hablar solo y en voz alta, no es algo malo. Es un hábito más común y saludable de lo que parece. En algunas culturas se vincula esta práctica a personas solitarias o que presentan trastornos mentales. Pero por parte de la comunidad científica se presentan investigaciones que consideran hablar solo y en voz alta como una herramienta clave para mejorar la memoria, la concentración, la toma de decisiones y la confianza en uno mismo. Hay especialistas que aseguran que hablar con uno mismo puede ser una señal de inteligencia emocional y conciencia personal.
Gary Lupyan, profesor de psicología de la Universidad de Wisconsin, comenta en la BBC que hablar solo y en voz alta estimula áreas del cerebro relacionadas con la memoria. El experto menciona un experimento en el que los participantes que pronunciaban en voz alta los nombres de ciertos productos lograron identificarlos con mayor rapidez al ver imágenes, en comparación con quienes no lo hicieron. «Decir una palabra en voz alta activa múltiples rutas mentales que intensifican el proceso de recuperación de la información», según Lupyan. Además, sugiere que esta práctica permite una mayor comprensión del entorno, haciendo del diálogo en voz alta una forma activa de interactuar con el mundo. Por lo tanto, en vez de reprimirlo por miedo al juicio, es hora de aceptarlo como una práctica natural, útil y saludable.
Los beneficios cognitivos de hablar solo y en voz alta
Uno de los beneficios de esta práctica es su capacidad para mejorar la memoria y facilitar el pensamiento crítico. «Cuando verbalizamos lo que pensamos, nos forzamos a organizar mejor nuestras ideas, lo cual incrementa la claridad mental», sostiene Gary Lupyan.
Desde la Clínica Cleveland aseguran que hablar solo y en voz alta puede ayudar a trazar planes, mantener la concentración y tomar decisiones más racionales, ya que actúa como una especie de «resolución interna de problemas».
Según la psicóloga Grace Tworek, es una forma eficaz de conectar contigo mismo, organizar tus pensamientos y sentimientos. “Hablar contigo mismo mejora la motivación y enfrentar una tarea difícil con una charla alentadora puede ser la diferencia entre posponerla o actuar”, afirma.
Los especialistas de la clínica indican que los atletas que practican el diálogo interno positivo muestran mejoras en su rendimiento durante la competición. Además, sostienen que la técnica refuerza la autoconfianza y prepara mentalmente para el desafío, al convertir una emoción desbordante en una energía controlada.
La salud emocional y la autorregulación
Además de los efectos cognitivos, el diálogo en voz alta tiene un impacto significativo en la salud emocional. Los expertos de WebMD resaltan que este tipo de conversación interna puede aliviar el estrés, disminuir la ansiedad y mejorar el estado de ánimo.
«Hablar solo proporciona una vía para exteriorizar emociones reprimidas. Por ejemplo, expresar en voz alta lo que nos enfada puede reducir la intensidad del enfado», explican los referentes.
A su vez, mencionan que este proceso de verbalización ayuda a regular las emociones al convertirlas en palabras, haciéndolas más comprensibles y manejables. En contextos de soledad o ansiedad, advierten que hablar en voz alta puede generar una “presencia” reconfortante, proporcionando un sentido de acompañamiento interno.
«A través del lenguaje, creamos una conexión con nosotros mismos que promueve la estabilidad emocional y el autoconocimiento», afirman en WebMD.
Hablar solo: una herramienta contra la soledad
Para algunas personas, hablar solo puede parecer un signo de aislamiento. Sin embargo, resulta una estrategia para combatir la soledad porque al crear un espacio interno de diálogo se forma una compañía mental que disminuye el vacío social.
En situaciones de confinamiento o estrés prolongado, donde la comunicación externa disminuye, la necesidad de procesar pensamientos aumenta y hablar en voz alta con uno mismo es una manera de encontrar calma y equilibrio mental.
«El lenguaje es una herramienta social por excelencia, pero también puede ser utilizada hacia el interior como medio de autocuidado», afirman expertos de la Clínica Cleveland. Por lo tanto, destacan que no solo se trata de dar sentido a lo que ocurre alrededor, sino también de consolarse, motivarse o incluso reírse de uno mismo.
¿Cómo practicar un diálogo interno saludable?
La forma en que nos hablamos tiene un impacto directo sobre nuestra autoestima y bienestar. Los expertos recomiendan adoptar un tono amable, positivo y realista.
Para lograrlo, uno de los consejos más eficaces es hablarte en tercera persona o utilizar tu propio nombre, lo que permite tomar cierta distancia emocional. Esto facilita una evaluación más objetiva de la situación y reduce el estrés.
Otra recomendación es centrarte en tus fortalezas al hablar solo porque reconocer tus logros y habilidades es clave para fomentar la autoconfianza. En lugar de criticarte, intenta identificar soluciones y motivarte con mensajes constructivos para enfrentar tus desafíos y lograr una gestión más eficiente de las emociones.