Contenido
- 0.1 ¿Por qué algunas personas no quieren llevar la bandera de España, según la psicología?
- 0.2 Las personas que usan el color gris son más sabias y elegantes que el promedio, según la psicología
- 0.3 ¿Qué significa poner en casa un árbol de Navidad en lugar del Belén, según la psicología?
- 1 Diferencia entre ética y moral
- 2 Ejemplos de ética y moral en el día a día
A menudo, tales conceptos que forman parte de la filosofía y psicología, ética y moral, suelen confundirse. Tienen similitudes pero no quieren decir lo mismo, ¿por qué? ¿En qué se parecen y cuál es la diferencia entre ética y moral?
Vamos qué quiere decir cada concepto, cuándo emplearlos, de qué forma diferenciarlos y por qué los solemos confundir.
Diferencia entre ética y moral
Qué es la ética
En general hablamos de un concepto sistemático que engloba los conceptos de bien y mal, correcto e incorrecto, virtud y vicio. La ética se basa en comprender los principios subyacentes que gobiernan el comportamiento humano y proporcionar criterios que permiten así evaluar las acciones que de forma moral son entonces o correctas o incorrectas, o buenas o malas.
En general, cuando nos referimos a la ética, nos sirve para la razón, la lógica y la reflexión filosófica para desarrollar sistemas éticos coherentes y universales.
Qué es la moral
Engloba valores bien parecidos pero que no son iguales, como valores y normas que guían el comportamiento humano en una sociedad o cultura específica. Suele referirse a las creencias, costumbres y convicciones sobre lo que está bien y lo que está mal.
Esta moralidad es distinta, según cada cultura, religión y para cada persona en grupo o bien individual. Y está rodeada de diversos factores que marcan todo ello, como el entorno, el país, la educación y el contexto histórico, entre otros.
La diferencia más importante entre ética y moral es que, si bien la primera estudia los principios morales y busca comprender qué hace que una acción sea moralmente correcta o incorrecta de manera abstracta, la moral entonces se refiere a las normas y valores específicos que guían el comportamiento en una sociedad o cultura particular.
Evoluciones entre ambos conceptos
Su evolución ha llevado a cada término a referir significados distintos aunque relacionados. El Gabinete Psicológico Javier Miralles especifica que la moral se plantea como el conjunto de juicios relativos al bien y al mal, destinados a dirigir la conducta de los humanos. “Es como una guía que nos orienta sobre el camino a seguir, dirige nuestras acciones en una determinada dirección”.
Según este experto, un comportamiento es moralmente aceptable cuando se ajusta satisfactoriamente a lo prescrito por un conjunto de normas o bien llamado un código moral.
Por su parte, la ética es vista para estudiar la conducta moral desde un punto de vista racional tal como se estudia en la filosofía o en la teología. La ética sería la teoría explicativa de la moral. “Como no existe una moral universalmente aceptada, será la ética quien compare y explique los diferentes factores sociales o religiosos que dan lugar a distintos sistemas morales. La ética es una teoría objetiva de la moral, mientras que ésta será un sistema subjetivo de normas”.
Ejemplos de ética y moral en el día a día
Para que nos quede más claro cada uno de los conceptos, los debemos adecuar a la vida diaria y cotidiana, si no, no vamos a saber cómo aplicarlos.
Moral
Siempre la verdad
Si no decimos mentiras, y siempre confesamos la verdad nos sentimos bien con nosotros y también con los demás. En este caso, es un claro ejemplo de moral y todos sabemos que está mal decir mentiras, por esto es una acción básica que empleamos a diario.
Sin trampas
Es otro ejemplo, si no hacemos trampas somos transparentes y nos permite juzgarnos bien a nosotros mismos y de cara al comportamiento que tenemos con los demás.
Ser leal
Este concepto de moralidad también lleva implícito muchas otras cosas. Hay que ser leal a los pensamientos, amigos a los demás y sobre todo a uno mismo en diversos estamentos de la sociedad.
Ejemplos de ética
Ser honesto
Tanto personales como profesionales. Esto implica decir la verdad, ser transparente y no engañar a los demás.
Respetar
Debemos tratar al resto de personas siempre con respeto, de manera independiente según sea género, raza, religión, orientación sexual, etc. Escuchar activamente a los demás y valorar sus opiniones, incluso si no estás de acuerdo con ellas.
Justicia
Otro ejemplo es actuar de manera justa y equitativa en todas tus decisiones y acciones.
Ser empático
Practicar la empatía al ponerse en el lugar de los demás y tratar de comprender sus sentimientos, pensamientos y circunstancias.
Responsabilidad
Uno mismo debe ser responsable de lo que hace y dice, y especialmente de sus consecuencias. Cumplir con tus compromisos y obligaciones.
Acciones voluntarias
Es otra de las cosas que se pueden hacer en este sentido. Debemos participar activamente en actividades voluntarias y de servicio comunitario.
Conflictos entre ética y moral
Puede haber situaciones en las que la ética y la moral estén en conflicto, ello genera dilemas éticos que requieren reflexión cuidadosa, según el centro Sukha.
Además los expertos psicólogos de este centro concluyen que la educación y las experiencias personales realizan un papel importante en la formación de principios éticos y valores morales, moldeando la perspectiva única de cada persona.