Hacer pesas está bien, pero hay un ejercicio mejor para que los mayores de 65 mejoren el equilibrio y eviten caídas

Esta práctica es suave, efectiva y mucho más segura que cualquier rutina en tierra firme

Mujeres, ejercicio, deporte

Mujer con ropa de ejercicio.

A medida que aumenta la edad, cuidarse y fortalecer los músculos pasa a ocupar un papel fundamental. Esto no es un simple comentario que se lee en las revistas, sino que es más crucial de lo que muchos creen.

Según la Unidad de Prevención de Caídas de IMED Colón, el 25 % de los mayores de 65 años sufre al menos una caída al año. En España, aproximadamente el 30 % de las personas mayores de 65 años pasa por una caída anualmente.

Lo más preocupante es que partir de los 80 años, la cifra se dispara hasta el 50 %. No se trata de sustos sin importancia, las caídas son una de las principales causas de lesiones graves y, en muchos casos, de mortalidad en este grupo de edad.

Frente a esto, hay un ejercicio que merece más atención del que tiene. No es un secreto de gimnasio ni una rutina de pesas. Es el primo acuático del conocido Tai Chi: el Ai Chi.

Este es el ejercicio que fortalece el equilibrio en mayores de 65 años

Uno de los mejores ejercicios para mantener el equilibrio no requiere máquinas, ni correr, ni saltar. El Ai Chi se practica en el agua, y ahí está su ventaja: el cuerpo se mueve con suavidad, sostenido por la flotación, y trabaja la musculatura sin castigar las articulaciones.

Este ejercicio combina respiración profunda con movimientos lentos y amplios que fluyen al ritmo del agua. Cada gesto implica al cuerpo entero, pues se trabaja brazos, piernas y tronco. Se entrena el control, la estabilidad y, sin que uno lo note, se fortalecen los músculos clave que previenen caídas.

Los beneficios son numerosos. Mejora el equilibrio, la postura, la flexibilidad y la fuerza muscular. Además, el agua templada relaja el sistema nervioso, alivia tensiones y reduce el estrés. Personas con dolor crónico, rigidez, o problemas articulares encuentran en el Ai Chi una práctica segura y eficaz.

Por otro lado, también estimula la circulación, apoya la salud cardiovascular y ayuda a mejorar la movilidad tras operaciones o lesiones. No exige un nivel físico alto para comenzar, además, basta con dos sesiones por semana para notar cambios.

Asimismo, es una excelente forma de mantener el contacto social. Muchas clases se hacen en grupo, lo que añade otro componente importante.

¿Cuál es la diferencia entre el Tai Chi y el Ai Chi?

Aunque comparten origen y filosofía, no hay que confundirlos. El Tai Chi se practica en tierra firme, mientras que el Ai Chi se hace en el agua, normalmente a la altura de los hombros.

El agua proporciona soporte. Permite movimientos más suaves, reduce el impacto, y elimina prácticamente el riesgo de caídas. Es ideal para personas con movilidad reducida, o que necesitan un entorno más seguro para moverse con confianza.

Ambos entrenan cuerpo y mente, promueven la concentración y reducen el estrés, pero el Ai Chi, por su entorno acuático, se adapta mejor a quienes buscan una rehabilitación progresiva o una forma de mantenerse activos sin forzar el cuerpo.

Salir de la versión móvil