Contenido
- 0.1 ¿Tienes picor de piernas al andar o después de correr? éstas son las causas
- 0.2 Adelgaza en diez minutos al día: la rutina definitiva de un entrenador personal
- 0.3 Más efectivo que hacer planchas: el ejercicio de yoga que ayuda a tonificar el abdomen más rápido
- 1 ¿Por qué es importante hacer ejercicios para reducir la tripa?
El cuerpo requiere de una amplia variedad de hábitos saludables para lograr una condición regular y equilibrada que permita un desarrollo eficiente de las funciones vitales de los sistemas. Entre ellos se encuentran una alimentación variada y nutritiva, realizar controles médicos de rutina con cierta periodicidad, un descanso adecuado de entre 7 y 9 horas, así como también la actividad física y los ejercicios. Si quieres decir adiós a tu tripa, hay una serie de ejercicios para despedirte de la grasa en semanas. Y no solamente te aporta una mejor condición estética, también un cuerpo más funcional y cuidado.
La zona abdominal es una de las partes del cuerpo en donde se manifiestan los primeros rasgos de la mala alimentación y el sedentarismo. En este sentido, si logras dedicar al menos 30 minutos diarios a ejercitar tu cuerpo vas a sentir una clara transformación y bienestar general. Ya sea en gimnasios, clubes o centros de entrenamiento con el asesoramiento de un profesional deportivo, desde la comodidad de tu hogar o en un parque, es recomendable realizar actividad física para un desarrollo corporal que te brinde seguridad, prevención de lesiones y enfermedades. Existen una amplia variedad de ejercicios para reducir la barriga que son prácticos, simples y dinámicos para que aprendas a implementarlo sin dificultades.
¿Por qué es importante hacer ejercicios para reducir la tripa?
Si no dispones de objetos o máquinas, puedes ejercitar tu abdomen con la movilidad de tu mismo cuerpo. El entrenamiento te da energía, mejoras en tu salud general y lograr un abdomen plano y firme. Si conoces los ejercicios para reducir tripa, fortaleces toda tu estructura ósea y muscular para mejorar tu desplazamiento y actividades cotidianas.
A través de una rutina de entrenamiento puedes fortalecer tu organismo a nivel general, obtener múltiples ventajas y beneficios para tu coordinación, fuerza, movilidad, equilibrio y potencia.
Según la Clínica Cleveland, la grasa subcutánea se encuentra justo debajo de la piel y es lo que se ve en el espejo. Pero aseguran que la grasa visceral se encuentra más profundamente, rodea los órganos y puede ponerla en riesgo de sufrir enfermedades como diabetes, enfermedades cardíacas, síndrome de ovario poliquístico (SOP) y más.
El dietista David Creel, de la Clínica Cleveland, sostiene que «al perder entre el 5 % y el 10 % de su peso corporal, puede mejorar la presión arterial, el azúcar en sangre, los niveles de colesterol, la movilidad, la función sexual y más».
El ejercicio aeróbico quema calorías y ayuda a reducir la grasa corporal total, incluida la grasa abdominal. “El ejercicio aeróbico estimula el metabolismo durante el ejercicio y durante un breve período después de él. También puede tener beneficios indirectos positivos sobre el peso, como un mejor sueño y una reducción del estrés”, dice David Creel.
Al aumentar la frecuencia cardíaca, logras fortalecer los huesos, controlar la presión arterial y mejorar el equilibrio. Por eso, para obtener mejores resultados, intente realizar 150 minutos por semana de ejercicio cardiovascular de intensidad moderada: salir a andar a paso ligero, pasear en bicicleta, nadar en la piscina o correr.
¿Cuáles son los ejercicios para reducir la tripa?
La Clínica Silhouette explica la eliminación de la grasa abdominal requiere un enfoque estratégico que combine la actividad cardiovascular con el entrenamiento de fuerza. Hay diferentes ejercicios que se centran en los músculos centrales para reducir la barriga, tonificar y endurecer el abdomen.
«Los ejercicios de fuerza no sólo ayudan a recortar la cintura, sino también a desarrollar músculo magro, lo que puede aumentar el metabolismo y ayudarle a quemar más calorías a lo largo del día», aseguran.
Abdominales tradicionales
Los abdominales tradicionales ayudan a tonificar los músculos abdominales superiores. Acuéstate boca arriba con las rodillas flexionadas, las manos detrás de la cabeza y levanta la parte superior del cuerpo del suelo, contrayendo los músculos abdominales.
Elevación de piernas
El ejercicio de elevación de piernas es otra recomendación. Tienes que colocarte boca arriba con las piernas estiradas, luego levántalas del suelo utilizando los músculos abdominales inferiores y bájalas sin tocar el suelo para trabajar el tronco.
Planchas
Además, se aconseja ejecutar planchas, un ejercicio para la fuerza general del núcleo. Mantén la posición de flexión de brazos con los brazos estirados y el cuerpo en línea recta desde la cabeza hasta los talones todo el tiempo que puedas.
«La postura de la plancha consiste en mantener una posición de flexión de brazos mientras se apoya sobre los antebrazos. Este movimiento simple es el ejercicio ideal para fortalecer los músculos centrales cruciales. A lo largo del día, casi todos los movimientos que realiza giran en torno al core, desde recoger objetos del suelo hasta girar para ver si hay despejado el camino mientras conduce», explican desde la Escuela de Medicina de Harvard.
Abdominales en bicicleta
Los abdominales en bicicleta son una variable y alternativa del ejercicio principal. Te acuestas boca arriba con las manos detrás de la cabeza, y junta el codo derecho y la rodilla izquierda mientras extiendes la pierna derecha hacia fuera. Tienes que alternar los lados en un movimiento de pedaleo.
Escalada
Otro ejercicio para reducir la barriga es la escalada. Para realizarlo, colócate en posición de plancha y lleva las rodillas hacia el pecho de una en una con un movimiento de carrera.
De este modo, se activan tanto el tronco como el sistema cardiovascular. Las rodillas altas son un entrenamiento recomendado porque aumenta el ritmo cardíaco y para realizarlo debes llevar las rodillas lo más alto posible en cada paso.
Otras prácticas para reducir tripa
La ingesta rápida, sin masticar los alimentos, puede traducirse en una distensión abdominal, que, si bien puede ser por varias razones, principalmente se da en personas que no dedican un tiempo razonable a comer, sin tragar aire, y masticando la cantidad de veces necesarias cada bocado.
Cambiar esta situación es sencillo: siéntate y toma el tiempo que requieras para comer, ya que está en juego tu salud. Debes masticar más despacio y siendo consciente de lo que comes en cada momento.
En síntesis, los ejercicios para reducir la barriga te permiten obtener un abdomen firme y tonificado, lo que favorece tu condición física para mejorar el equilibrio, la coordinación y movilidad.