EXCLUSIVA LOOK | El lugar del banquete, el menú… Te desvelamos todos los detalles de la boda de Alberto Garzón y Anna Ruiz

El enlace de Alberto Garzón y Anna Ruiz está a punto de celebrarse. El 26 de agosto ambos dirán adiós a la soltería por todo lo alto en el pueblo natal de la madre del novio, recientemente fallecida. Un lugar con el que guarda un estrecho vínculo, pues allí el político aprendió a hablar y a andar. Cenicero, municipio de Logroño, con tan solo 2.176 habitantes censados, albergará pues una boda, que sin ningún género de dudas, quedará para el recuerdo. Y es que hasta este lunes muy pocos detalles se conocían acerca de esta unión, que ambos han preferido llevar con la máxima discreción. Anunciaron su compromiso vía Instagram, sí, pero una vez hecho oficial, decidieron salvaguardar con celo los detalles de su enlace para evitar filtraciones. Sin embargo, LOOK ha tenido acceso en exclusiva a datos inéditos sobre el gran día del diputado y la joven médico de familia. Dónde se darán el ‘sí, quiero’, dónde celebrarán el convite o qué comerán los afortunados invitados son algunos de los detalles que LOOK puede confirmar.

En la mejor compañía posible, compartiendo sonrisas y futuro. (Foto de @alvarosantosweddingfilms)

Una publicación compartida de Alberto Garzón (@agarzoniu) el 14 de Abr de 2017 a la(s) 4:49 PDT

Alberto y Anna contraerán matrimonio por lo civil en una bodega de Cenicero que posee más de 100 años de historia y que controla más de 100 hectáreas de los mejores viñedos de la zona. Se trata de las Bodegas Riojanas y allí, según confirman a LOOK, es muy posible que sea el tío de Garzón, que es juez, quien oficie la ceremonia. Tras darse el ‘sí, quiero’, los asistentes se trasladarán al restaurante de la ‘Huerta Vieja’ en el que el menú suele costar unos 100 euros por comensal. Está situado en La Guardia, en pleno corazón de la Rioja Alavesa y a tan solo 12 kilómetros de Cenicero.

Se acaba el año 2016, y empezamos el 2017 necesariamente con una sonrisa. ¡Feliz año nuevo! No liquidéis nada… 😉

Una publicación compartida de Alberto Garzón (@agarzoniu) el 31 de Dic de 2016 a la(s) 4:19 PST

Los invitados disfrutarán allí de un cóctel de bienvenida en los jardines de un edificio de madera y piedra ubicado entre viñedos y con vistas a la Sierra. Un cortador de jamón deleitará a los presentes, que degustarán también lágrimas de salpicón, chupito de sopa fría de espárragos de navarra, cucurucho de mouse de hongos y topping de pipas tostadas, cubito de bacalao en tempura, salmorejo con helado de aceite de oliva, cuchareta de pulpo a la gallega y conserva de huevo roto. Una vez finalizada la recepción, se trasladarán a un salón diáfano de 300 metros cuadrados con capacidad para 250 invitados, donde disfrutarán de un banquete muy especial.

Los platos escogidos por la pareja se basan en un carpaccio de ternera con virutas de queso parmesano, saquitos de langostino en salsa americana, pastel de puerros y gambas con salsa de queso, gambas de Huelva, bogavante horneado con vinagreta en su jugo, sorbete de mandarina para refrescar el paladar y solomillo de ternera a la brasa acompañado de puré de patata, pimiento del piquillo y espárragos trigueros. Y como broche final, una copa de cava Benito Escudero y una pirámide de chocolates con helado de vainilla.

Una bonita historia de amor

En el mismo sitio en el que la conocí y en el mismo metro cuadrado. Pero justo cuatro años después. Ocurrió hace un mes, durante una noche iluminada por las intenciones. Y me dijo que sí, que aceptaba casarse conmigo. Como el mundo sigue necesitando de compromiso, nosotros continuamos luchando juntos

Una publicación compartida de Alberto Garzón (@agarzoniu) el 21 de Ago de 2016 a la(s) 3:24 PDT

La boda celebrada el próximo 26 de agosto sellará la historia de amor protagonizada por Alberto Garzón y Anna Ruiz desde hace cinco años. La pareja nunca ha escondido su noviazgo y han hecho de Instagram la plataforma perfecta para exponer sus viajes o sus cenas románticas. De hecho, esta red social fue el altavoz de su compromiso: «En el mismo sitio en el que la conocí y en el mismo metro cuadrado. Pero justo cuatro años después. Ocurrió hace un mes, durante una noche iluminada por las intenciones. Y me dijo que sí, que aceptaba casarse conmigo. Como el mundo sigue necesitando de compromiso, nosotros continuamos luchando juntos».