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Cómo usar la manteca de karité para el cabello, la cara y el cuerpo

Los beneficios nutritivos, hidratantes y elastizantes de la manteca de karité nos serviran para tratar el cuerpo, el rostro y también el cabello.

La manteca de karité es un ingrediente natural que no solo limita sus usos a la cocina, ya que tiene también beneficios para el cuerpo y el cabello.

Un extracto de las semillas del árbol de karité, nativo en el África Occidental, la manteca de karité nace como alimento y es un excelente ingrediente para cocinar, pero además, muchas mujeres africanas también lo usan para tener una piel más joven y aterciopelada. En el campo cosmético, de hecho, cuenta con un amplio uso, por su efectividad en la piel y el cabello.

Cómo usar la manteca de karité para el cabello, la cara y el cuerpo

Entre las muchas propiedades que tiene la manteca de karité, destaca que sea nutritiva e hidratante, elastizante, reparadora y antiinflamatoria, de modo que veamos ahora cómo hacer un mejor uso de la manteca de karité para el cabello, la cara y el cuerpo.

Mascarilla de manteca de karité para el rostro

Ampliamente utilizada en cosméticos dedicados al cuidado de la cara, la manteca de karité está presente en muchas cremas , gracias a su acción antioxidante y vigorizante.

Es ideal especialmente como un producto antienvejecimiento y para la piel seca que necesita una hidratación profunda, ya que ayuda a contrarrestar el envejecimiento de la piel y a reponer la película hidrolipídica de la piel. También se puede aplicar en el área alrededor de los ojos, para combatir las bolsas y en los labios como protección. Además de las cremas a base de manteca de karité, disponibles en el mercado, podemos hacer mascarillas caseras como esta que os explicamos.

Lo único que tienes que hacer es colocar manteca de karité en un agua hirviendo y agregas un aceite, de acuerdo con tus necesidades, siguiendo la proporción de 3 a 2. Si, por ejemplo, queremos obtener un efecto antienvejecimiento, podemos optar por aceite de rosa mosqueta o aceite de germen de trigo , rico en vitamina E y propiedades elastificantes y antioxidantes. Si desea obtener un efecto más nutritivo, puedes agregar un poco de aceite de almendras, que es hidratante, emoliente y regenerador.

Después de preparar la mezcla, simplemente la dejas secar y luego la aplicas en la cara. Debe mantenerse durante unos veinte minutos y luego enjuagarse.

Mascarilla para el cabello

Esta manteca se puede utilizar también para el tratamiento del cabello quebradizo y dañado . Podemos así hacer una mascarilla para el pelo mezclando manteca de karité, una cucharada de aceite de almendras dulces y una cucharada de aceite de oliva. Una vez mezclado todo, se puede aplicar directamente sobre el cabello y dejarlo durante un buen rato. Para obtener resultados aún más efectivos, puedes aplicar la mascarilla por la noche antes de acostarte. Simplemente envuelve el cabello con la mascarilla en una toalla, te vas a dormir y al día siguiente te lavas el pelo. Si, por otro lado, tu piel es grasa y tiendes a sufrir caspa, la manteca de karité mezclada en agua hirviendo con aceite de árbol de té , o también, aceite de romero.

Crema para el cuerpo

Si sufres de piel seca y agrietada, puedes hacerte un exfoliante, capaz de eliminar la descamación y agrietamiento y promover la renovación celular. Simplemente mezcla un poco de manteca de karité con azúcar, pasa sobre el cuerpo y luego enjuaga. Para aquellas que queráis una crema corporal hidratante, podéis agregar aceite de almendras a la manteca de karité y mezclar bien hasta obtener una mezcla uniforme y homogénea. En ese momento podemos insertar algunas gotas perfumadas del aceite esencial de nuestra elección, ya sea naranja o aceite esencial de lavanda.

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