Mary de Dinamarca pillada entre lágrimas al volver a Copenhague para Navidad
La princesa Mary de Dinamarca ya ha regresado a Copenhague para pasar la Navidad.
No son tiempos fáciles para la Familia Real de Dinamarca, a raíz de las recientes polémicas.
El matrimonio de Federico y Mary está en el punto de mira, aunque se mantiene unido.
La princesa Mary de Dinamarca ha puesto punto final a su estancia en Australia y ha regresado a Copenhague, donde la Familia Real va a celebrar, toda junta, las fiestas navideñas en el Castillo de Marselisborg. La esposa del príncipe Federico se marchó a su tierra natal a finales del mes de noviembre, tras finalizar sus compromisos oficiales, y lo hizo en compañía de sus hijos menores. Un viaje habitual para la princesa pero que, este año, ha estado marcado por la polémica de las fotografías del heredero en Madrid en compañía de Genoveva Casanova.
Por este motivo, cada uno de los pasos de la pareja ha sido analizado hasta el mínimo detalle, a pesar de que, en apariencia, la estrategia de la Casa Real ha sido reforzar la imagen de unidad del matrimonio y no hacer declaraciones sobre la situación. Sin embargo, ha sido inevitable que los medios estén muy pendientes de los movimientos de la pareja y que, a cada uno de sus gestos, se le haya intentado buscar un doble significado, sobre todo, a los de la princesa.
Mary ha pasado aproximadamente dos semanas alejada del foco mediático y en compañía de sus hijos menores. Al final de su estancia en Nueva Zelanda se sumó el príncipe Federico y la princesa Isabella, no así el príncipe Christian, que ha permanecido en Dinamarca. Sin embargo, todos han regresado ya a casa para pasar las fiestas con la Reina.
Un regreso a casa que, no obstante, ha generado muchos comentarios, ya que la familia ha sido captada por los fotógrafos en el aeropuerto antes de poner rumbo a la capital danesa. Hasta aquí, nada fuera de lo común, ya que los príncipes han intentando mantener una imagen de unidad frente a la polémica. Sin embargo, en las fotografías que ha publicado el tabloide británico Daily Mail se ve a la princesa despidiéndose de unos amigos en el aeropuerto de Queenstown y aparentemente llorando.
Unas lágrimas que, como era de esperar, han generado un sinfín de comentarios, ya que bien pueden interpretarse como la tristeza de la princesa al decir adiós a sus amigos o que pueden significar que pasar por un complejo momento.
Una situación delicada
No hay que obviar que para la princesa Mary y su familia las últimas semanas han sido muy delicadas y ahora que vuelve a casa tiene que afrontar estar de nuevo en el punto de mira y que cada uno de sus gestos se analice a fondo. Es cierto que ahora pasará unos días en familia, pero ya de cara a final de año se retoma por completo la actividad oficial y volverá a estar en el foco mediático. Una situación que, sin duda, es motivo de preocupación para ella.
Las palabras de la princesa
Este regreso a Dinamarca se produce pocos días después de que desde la fundación que preside publicaran un críptico mensaje en el que la princesa aprovechaba para reflexionar sobre el paso del tiempo al felicitar el año a todos los colaboradores y seguidores de la institución: «El tiempo es algo peculiar. Cuantos más años has recorrido, más rápido parece pasar volando el año siguiente. A la vez, con el tiempo te vuelves cada vez más consciente de lo precioso que es cada momento, y cada año», comentaba la esposa del príncipe Federico. Unas palabras que, para muchos, tienen un doble sentido, aunque ella por ahora no ha hablado abiertamente de la situación que atraviesa su matrimonio.