Isabel II llega al castillo de Windsor y manda un mensaje a la nación
La reina Isabel y el príncipe Felipe han abandonado el Palacio de Buckingham y se han alejado de la capital británica en medio de la crisis del coronavirus
Isabel II y el príncipe Felipe ya están en el palacio de Windsor. Ha sido en la misma mañana de este jueves cuando la reina británica fue vista abandonando su residencia habitual, el palacio de Buckingham con un perrito en sus brazos, comenzando así unas vacaciones de Pascua muy diferentes en las que su mayor preocupación es el coronavirus. Por su parte, el duque de Edimburgo cogió un vuelo desde Sandringham, donde pasa la mayor parte de su tiempo desde que se retiró de la vida pública.
Sin embargo, la gran noticia no es su llegada a la residencia, sino el mensaje que la reina Isabel ha mandado a través de sus redes sociales. «Felipe y yo llegamos a Windsor hoy. Sabemos que muchas personas y familias en todo el Reino Unido y en todo el mundo están viviendo un período de gran preocupación e incertidumbre», comienza el texto.
«A todos se nos ha recomendado cambiar nuestras rutinas normales y nuestros patrones de vida por el bien de las comunidades en las que vivimos y, en particular, para proteger a los que son más vulnerables dentro de ellas. En momentos como estos, recuerdo que la historia de nuestra nación ha sido forjada por personas y comunidades que se unen para trabajar como una sola, concentrando nuestros esfuerzos combinados con un enfoque en el objetivo común.
Estamos enormemente agradecidos por la experiencia y el compromiso de nuestros científicos, médicos, servicios de emergencia y servicios públicos; pero ahora más que nunca en nuestro pasado reciente, todos tenemos un papel vital que desempeñar como individuos, hoy, en los próximos días, semanas y meses.
Muchos de nosotros tendremos que encontrar nuevas formas para mantenernos en contacto unos con los nuestros y asegurarnos de que nuestros seres queridos están seguros. Estoy segura de que estamos a la altura de ese desafío. Puede estar seguro de que mi familia y yo estamos listos para desempeñar nuestro papel», termina el mensaje.
El traslado de Isabel II a Windsor no ha pillado por sorpresa y es que la monarca inglesa pertenece a un grupo de riesgo. Tanto ella como su marido, su hijo, el príncipe Carlos, y su nuera, Camilla Parker-Bowles, tienen más de 70 años y, por lo tanto, en un rango de edad que les pone en riesgo elevado si se contagian por el coronavirus, de ahí que cualquier precaución sea poca.