¿Cómo es vivir con Vargas Llosa? Tamara Falcó lo cuenta todo
La colaboradora ha revelado en su última intervención en "El Hormiguero" algunos detalles de su convivencia con el Nobel, así como de su relación con Íñigo Onieva.
Tamara Falcó ha vuelto a convertirse, una vez más, en la gran protagonista de la tertulia de “El Hormiguero”. La colaboradora del espacio de Atresmedia ha acaparado toda la atención cuando ha revelado algunos detalles de su día a día en casa de su madre y ha explicado cómo es la convivencia con Mario Vargas Llosa. Tamara ha contado que ella ya sentía gran admiración por el Nobel de Literatura antes de que se convirtiera en pareja de su madre y que el día a día con él es muy agradable: “yo ya le admiraba de antes. Además venía a algunas cenas y eso, pero cuando empezaron a salir y luego cuando ya se vino a casa pues le he tratado más y es que es un amor. Es una persona con una disciplina tan férrea… Es una persona llena de vida y siempre tiene una palabra amable», ha revelado la colaboradora.
Tamara siente un gran cariño por el escritor, hasta el punto de que a veces no ha dudado en pedirle consejo y le ha pedido que la ayudara con su blog: “ya que lo tenía en casa… pues tenía que aprovechar y a veces me preguntaba sobre lo que yo estaba escribiendo. Pero es que le interesa todo, habla con el jardinero, con el guarda de la caseta, con todo el mundo”, ha explicado. La hija de Isabel Preysler ha comentado cómo es la rutina del peruano, que demuestra lo disciplinado que es: “todos los días tiene la misma rutina: se levanta a las 5:30, lee, hace deporte durante una hora, se ducha, desayuna y ya empieza a escribir”, ha comentado la que fuera ganadora de MasterChef Celebrity. Tamara ha insistido mucho en el buen carácter de Mario, y cómo se interesa por todo lo que le rodea: “de trato es genial porque le interesa todo», ha resaltado la colaboradora.
Sin embargo, a pesar de su buen carácter, sí que ha habido algún momento en el que se ha sentido un poco molesto, sobre todo a comienzos de su relación con Isabel Preysler: «cuando la prensa se enteró de su relación igual teníamos veinte coches a todas horas detrás nuestro y Mario, que no estaba acostumbrado a todo esto, al principio estaba un poco incómodo pero luego la verdad que se lo tomó con bastante naturalidad’, ha explicado la joven.
En relación a esto, quien también se está adaptando a las cámaras y a la persecución de los periodistas es Íñigo Onieva, novio de Tamara. “ la verdad es que lo lleva fenomenal. Y doy gracias porque no siempre ha sido el caso. Hace su vida normal. De hecho, el otro día le pillaron con unos pantalones de ciclista, muy poco favorecedores, y le dio completamente igual. Él hace su plan y ya está», ha contado entre risas la colaboradora. Tamara se encuentra muy bien con su novio en estos momentos y no hay duda de que su relación va viento en popa, aunque de momento parece que no quiere confirmar si hay planes de boda: «hay chicos con los que he estado que me decían que no les gustaba salir en la prensa y que les suponía un estrés, aunque luego hay amigas de mi madre que dicen: ‘qué más dá, si te van a poner en la grapa’», ha asegurado.