La miserable vida de Melania Trump: la primera dama que quería ser modelo
Donald Trump (70) comienza su andadura en la presidencia de la Casa Blanca mientras su mujer, Melania Trump (46), lucha en la sombra contra su nueva realidad.
«Esta vida no era su sueño, si no el de Donald», cuentan fuentes cercanas a la primera dama en ‘Us Weekly’. De hecho, Melania está tratando de adaptarse a su nueva vida poco a poco, y por ahora, continúa viviendo en Nueva York por motivo del curso escolar de su hijo Barron (10), para lo cual, dispone de «el servicio secreto a su servicio y al servicio del niño».
Además están los asuntos de Melania con la prensa, así como con las redes sociales -lo hemos visto con movimientos tan polémicos como el de #FreeMelania- situando a la mujer del presidente de los Estados Unidos en el ojo del huracán mediático, e insinuando que podría, por un lado, aprovecharse de su nuevo estatus; y, por otro, verse perjudicada.
— Marv (@Marv_Vien) 23 de enero de 2017
I’m so glad this GIF exists. pic.twitter.com/a4BNmzfa5C
— summer. (@SummerNazif) 21 de enero de 2017
Everyone was wondering what was in the Tiffany box that Melania handed Michelle Obama… We were hoping it was this pic.twitter.com/dcoG4Ub2US
— RogelioGarcia Lawyer (@LawyerRogelio) 22 de enero de 2017
En cuanto a las cabeceras, está el episodio vivido con Anna Wintour (67) directora de ‘Vogue’, quien ha asegurado que la primera dama tendrá una portada en su publicación; O el vivido con ‘Daily Mail’, la cabecera que la propia Trump demandó por difamación, al asegurar que había perdido «la última oportunidad de convertirse en imagen de una firma comercial por llegar a la presidencia».
Fuentes cercanas aseguran que «está descontenta con cómo ha terminado su vida»
Mucho ha llovido, de hecho, desde que una joven de, entonces, 26 años de origen esloveno, llegara a los Estados Unidos con el ‘sueño americano’ de querer hacer despegar su carrera de modelo. Fue en 1996 cuando Melania Trump aterrizó en Nueva York con una maleta llena de sueños que hoy, según las citadas fuentes, se han visto truncados. «Está descontenta con cómo ha terminado su vida. Melania es miserable».
Desde que su marido fue proclamado Presidente de los Estados Unidos, ella se ha mantenido «recluida y escondida» en un lujoso apartamento de Nueva York, aunque las fuentes dicen que «le encanta Palm Beach (Florida)», donde también dispone de una lujosa finca de 300 millones de dólares.
Según una fuente familiar, hace solo unos días, cuando Melania tuvo la visita al país de Akie Abe (54) -mujer de Shinzō Abe, primer ministro de Japón-, se vio en la obligación de visitar con ella, la iglesia de Bethesda -donde los Trumps se casaron en el 2005- y caminaron por toda de la ciudad, incluyendo una visita al Museo Morikami y a los jardines japoneses de ‘Delray Beach’. «No dejes que su sonrisa en esas fotos te engañe», concluye la fuente de la publicación citada.