La estrategia de la baronesa Thyssen para acercarse a su hijo Borja
Tita Cervera ha posado junto a su hijo Borja en una reciente exposición en el Museo Thyssen de Madrid
Las imágenes han desatado todo tipo de rumores sobre si madre e hijo han conseguido acercar posturas
El legado de la baronesa Thyssen siempre ha sido objeto de titulares. Existe una gran incertidumbre acerca de lo que pasará con la millonaria herencia de Tita Cervera el día de mañana, ya que, hasta ahora, ha protagonizado constantes años de idas y venidas con su primogénito, Borja Thyssen. No obstante, todo parece estar cambiando. De hecho, en el último número de una conocida revista del país, ambos aparecen posando juntos en una exposición de Madrid del pintor Peter Halley. Pero todo podría ser el resultado de una estrategia realizada por la coleccionista de arte con el fin de acercarse a su hijo.
Cuando Tita Cervera decidió volver a ser madre de dos mellizas, con 63 años y a través de gestación subrogada, se llegó a comentar que fue un momento clave en su relación con su primogénito, ya que la llegada de las niñas habría sido uno de los motivos que habría propiciado el distanciamiento con Borja. Sin embargo, la baronesa nunca ha dejado de luchar por mantener a su familia unida y, haciendo todo lo posible para conseguirlo, realizó unas recientes declaraciones para intentar que su vástago cambiara de actitud.
Fue a principios de año cuando Cervera confesó que su hija Carmen tenía suficiente capacidad para ser su sucesora, un comentario que no habría sentado bien a Borja Thyssen, tal y como su madre sabría que pasaría. Y es que, de acuerdo con lo publicado por Diez Minutos, Tita dio esas declaraciones para que su primogénito moviera ficha en una posible reconciliación entre ambos.
De acuerdo con la información del medio citado, a pesar del misterio que hay generado alrededor, Carmen ya tendría organizada la estabilidad económica de los suyos para el día que ella no esté. Su colección privada estaría repartida de la siguiente manera: la mitad para Borja y la otra mitad para sus dos hijas, Carmen y Sabina. Cabe destacar que, hasta ahora, las mellizas han optado por un perfil bajo pese a la fama que sostiene el clan al que pertenecen, algo que cambiaría si el día de mañana aceptan tener esa responsabilidad en la colección privada de su madre.
Esta información ya la adelantó el pasado mes de enero Miquel Valls, desde el programa Espejo Público: «No dice que Borja se quede sin legado y sin herencia. Se van a repartir las cosas como ellos tienen acordado a día de hoy, sin que nadie sustituya el papel de nadie. Con lo cual, el hijo va a seguir teniendo un rol importante y fundamental». A pesar de que Carmen podría continuar el legado de la baronesa, Valls insistía en que esto no le restaría a Borja nada de lo que ya tuviera. Además, señalaba que el primogénito de Tita era también hijo del barón Thyssen, por lo que «heredó mucho más de lo que heredarán las hijas de Carmen».