La decisión más personal de Morante de la Puebla: abandona los toros por depresión

Morante de la Puebla, el torero sevillano que más aman los buenos aficionados, corta la temporada y abandona los toros por este año. Está triste. Una retirada a tiempo es una victoria, un dicho que esta ocasión es una realidad.

Hermético y con personalidad enigmática, el diestro no atraviesa un buen momento personal. Una circunstancia que le impide torear bien, con temple, como a él le gusta.  

La depresión le puede, y no es la primera vez que se retira. Los aficionados creen que está aburrido, y sin ilusión. Cortó el año pasado un rabo en Sevilla, un hito, un año después de haber alcanzado la marca de 100 corridas de toros, cifra inaudita en un torero de arte, como es él.

Lo ha hecho todo en el toreo y pocos retos le quedan en los ruedos. Este San Isidro no ha tenido suerte en sus faenas, incluso le chillaron los aficionados en Las Ventas.

«No responde a los antidepresivos y además en los últimos días le hemos hecho pruebas de todo tipo. Le fallaban las piernas y se quedaba como sin fuerza», explica a ‘El Mundo’ su apoderado.

Estaba anunciado en Marbella  para este sábado y en la corrida de la Beneficencia de Madrid el próximo domingo día 9. Se va pero no definitivamente, al menos así lo ha hecho saber su apoderado Pedro J. Marques, a ‘El Mundo’.

Peculiar

Su pasión, la misma que transmite cuando torea bien, por los toros comienza a los 5 años. Su familia no era taurina. Aprendió la lidia a campo abierto, no en una escuela. Viendo torear a toreros de su zona, y  asistiendo como oyente en las tertulias taurinas que se formaban en los bares locales. Además de pisar los ruedos como espectador en becerradas locales y plazas de Sevilla siempre que podía.

Su aprendizaje es en las marisma, su tierra, toreando  a trompicones desde niño. Leonardo Muñoz -padre del torero Emilio Muñoz- es su descubridor y su primer apoderado. Tímido y reservado, Morante no se prodiga en público.

Divorciado y casado

En 2005 contrajo matrimonio con Cynthia Antúnez, divorciándose  después en 2008. En 2010 se casó en segundas nupcias con Elisabeth Garrido. Es Premio Nacional de Tauromaquia, concedido por su renovación del toreo clásico en 2021. Premio que donó a la Casa de la Misericordia de Pamplona.

Morante de la Puebla está vinculado -pero no se ha presentado nunca a las elecciones en listas- por ningún partido político. Tiene amigos que le siguen en Vox y que le van a ver a las plazas donde torea, como Santiago Abascal y Rocío Monasterio.

El 13 de agosto de 2017 anunció por tercera vez la retirada del toreo durante un tiempo indefinido, alegando desencanto. Hoy, anuncia de nuevo su marcha de las plazas.