Carolina Herrera, arropada por sus hijas en el último adiós a Reinaldo en Nueva York
La iglesia de St. Vincent Ferrer en Nueva York ha sido el escenario del último adiós a Reinaldo Herrera
Reinaldo Herrera falleció el pasado 18 de marzo a los 91 años
Carolina Herrera se ha mostrado muy afectada por el fallecimiento de Reinaldo
La iglesia de St. Vincent Ferrer en Nueva York ha sido el escenario este viernes, 21 de marzo, de una emotiva ceremonia en la que familiares y amigos han dado el último adiós a Reinaldo Herrera, esposo de la reconocida diseñadora Carolina Herrera. El aristócrata venezolano falleció el pasado 18 de marzo a los 91 años, dejando un legado imborrable en el mundo de la moda y la alta sociedad. La iglesia, ubicada en el Upper East Side de Manhattan, se ha llenado de seres queridos que han acudido a rendir homenaje a un hombre cuya vida estuvo marcada por el buen gusto, la elegancia y «una profunda devoción hacia su familia».
Carolina Herrera, su compañera durante más de cinco décadas, estuvo acompañada por sus hijas en común con Reinaldo, Carolina Adriana y Patricia Cristina, quienes no se han separado de su madre en ningún momento. La menor de las dos hijas de Reinaldo ha dedicado además unas palabras a su padre, previa a la ceremonia. Lo ha hecho través de sus redes sociales. «Hay dos cosas seguras. Te querré siempre y te echaré de menos. A mi primer amor y al hombre que me enseñó sobre la curiosidad, los libros, el arte, la belleza, la amistad, a ser siempre un poco traviesa, a reír mucho, a amar con todo lo que tienes, a ser considerada, a ser amable, a decir lo que piensas, y que desgraciadamente me dio mi mal genio. Gracias», ha escrito.
Reinaldo Herrera, marqués de Torre Casa, nació en Caracas en 1933. Su vida estuvo siempre ligada al arte y la cultura. Además de su título nobiliario, fue periodista y trabajó como editor en la revista Vanity Fair, donde su visión y criterio estético dejaron una huella imborrable. Su matrimonio con Carolina Herrera en 1968 no solo fue una unión de amor, sino también una alianza que potenciaría la carrera de la diseñadora. Aunque Reinaldo no participaba directamente en la gestión de la marca, su apoyo incondicional y sus conexiones en la alta sociedad fueron fundamentales para el despegue de la firma Carolina Herrera en los años 80. Su hogar en Nueva York se convirtió en punto de encuentro de personalidades influyentes, desde la realeza hasta estrellas del arte y la moda.
Tras la ceremonia en Nueva York, se espera que los restos de Reinaldo sean trasladados a Venezuela, cumpliendo así con sus deseos y honrando sus raíces. Este último adiós en su tierra natal permitirá a familiares y amigos en su país rendirle homenaje y celebrar su vida y legado. En estos momentos de duelo, la familia Herrera ha recibido innumerables muestras de cariño y apoyo de todo el mundo. La familia ha expresado su agradecimiento por este apoyo, que les brinda consuelo en estos momentos difíciles.