Ágatha Ruiz de la Prada y Luis Miguel Rodríguez, algo "más que amigos"
La diseñadora había vuelto a la primera línea mediática tras su ruptura con Luis Gasset y su nuevo acercamiento a su exnovio.
Siempre que Ágatha Ruiz de la Prada ha tenido que enfrentarse a una ruptura sentimental ha viajado a París para lamer sus heridas, reflexionar y trabajar, que a fin de cuentas es su mejor terapia. Ahora vive entre las dos aguas que separan los rescoldos de su amor con Luis Gasset, finalizado hace algunas semanas, y su nuevo acercamiento a Luis Miguel Rodríguez. ¿Qué hay entre ellos?
La diseñadora responde con la claridad que le caracteriza a través de las páginas de la revista ‘Hola’. Ágatha se siente muy a gusto en la casa que adquirió hace casi una década en el corazón de la ciudad del Sena porque «aquí encuentro paz, tranquilidad, serenidad, cultura, desconexión… Aquí leo, hago cosas… Y estoy superbién. Es mi refugio», confiesa. Le costó cuatro años de reforma dejarla a su gusto. El objetivo era eliminar todos los ruidos ya que está ubicada en pleno centro de París, con los ruidos que eso genera. pero al final el esfuerzo mereció la pena. Además, confiesa que el salón es su rincón favorito.
Ágatha Ruiz de la Prada explica con todo lujo de detalles cómo se ha desarrollado su presencia en una boda con su exnovio, Luis Miguel Rodríguez, que tanto debate ha generado: «Con Luismi ha pasado una cosa muy extraña: se ha convertido en uno de mis mejores amigos. Con todo el asunto de Luis Gasset, que es difícil poner término a una relación tan bonita, Luismi me ha apoyado y ayudado mucho. Lo quiero un montón, pero lo conozco demasiado. No me apetece tropezar más veces con la misma piedra, aunque es verdad que es un amigo recurrente y divertido. Le puedo llamar para cenar. La boda fue la del hijo de mi mejor amiga, que es la ginecóloga Isabel Alonso Como conoce mucho a Luismi, me dijo de invitarlo. Y así fue. Él allí no conocía a mucha gente, así que lo pusieron en mi mesa y estuve pendiente de él».
Luis Miguel Rodríguez es un «amigo especial» pero en ningún caso un novio. La modista explica en su revista de cabecera las diferencias que les separan: «Lo que ha pasado con él me hace hasta gracia. Nos conocemos mucho, nos queremos un montón y somos superamigos, pero, de momento, descarto una nueva oportunidad. Además, su vida es muy diferente. Por ejemplo, me encanta París, Nueva York… A Luismi lo que le gusta es el eje Madrid-Parla-Toledo. Dice que allí es feliz. Como tiene que estar presente físicamente en su negocio y no habla idiomas, tampoco está cómodo fuera de España», argumenta.
Una explicación larga, fundamentada y que deja clara por fin cuál es la relación actual entre los dos después de un sinfín de rumores. No obstante, Ágatha Ruiz de la Prada ya dejó entrever a su llegada desde Paris -hace unos días- que lo suyo con el empresario no iba a poder ser. Ágatha respondió a los micrófonos de la agencia Gtres con la claridad que le caracteriza. ¿Qué hay entre Luis Miguel y ella? «Somos amigos, ya lo he dicho…» Preguntada por una posible reconciliación, la modista se mostraba ambigua de primeras al decir que «en principio no…», pero acabó por dar portazo a esta posibilidad: «Tengo las puertas bastante cerradas».