Una marea humana llena Caracas contra el narcodictador Maduro y desafía su maquinaria del terror

Venezuela vive este sábado otra jornada crucial de manifestaciones contra la autoelección del narcodictador Nicolás Maduro. Atosigado por un aislamiento internacional creciente y un pueblo que ha perdido el miedo para echarse a la calle contra el tirano, Maduro ha reforzado todavía más su de por sí brutal represión contra la oposición. Sin embargo, el pueblo, harto, ha ignorado esa maquinaria del terror y ha vuelto a responder de forma masiva al llamamiento de los líderes de la oposición para plantar cara a Nicolás Maduro. Eso sí, mientras tanto el balance de muertos y detenidos crece, a la par que crece la presión internacional para encontrar una salida negociada de la crisis que pasa, forzosamente, por que el narcodictador deje el poder.

En este sentido, el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, este mismo viernes –pocas horas antes de esta nueva y masiva concentración de protesta en Caracas– expresó su preocupación por la seguridad de la líder opositora María Corina Machado, que se declaró en clandestinidad ante las amenazas de secuestro por parte del chavismo. Y la misma preocupación ha expresado Blinken respecto al candidato de Machado y al que las cancillerías de los países democráticos dan por legítimo vencedor y, por tanto, el auténtico presidente electo de Venezuela, Edmundo González Urrutia –María Corina Machado no pudo presentarse a las elecciones al haber sido inhabilitada por el dictador…–.

«¡Edmundo presidente!»

Este sábado, las calles del centro de Caracas ofrecen de nuevo una imagen desoladora para Maduro: una marea humana sumándose a la marcha de protesta contra él, cientos de miles de personas que han perdido el miedo al régimen chavista y que han coreado al unísono gritos como «¡Edmundo presidente!» o «¡gloria al bravo pueblo de Venezuela!».

Quien ha movido esta nueva concentración contra el pucherazo del narcodictador ha sido María Corina Machado. Se sabe en la diana de Maduro. Él mismo lo ha dicho alto y claro. Consciente de que su seguridad está en peligro, como lo reconoce la propia Casa Blanca, María Corina Machado se cuida, pero lo justo. No se oculta en las movilizaciones, ella las lidera desde que son convocadas. Tiene claro que, junto a Edmundo González, tiene que estar a pie de calle pese al riesgo. De ahí que se haya negado a abandonar el país y que haya rechazado las ofertas de asilo y protección que le han llegado desde países democráticos.

Imágenes desde el camión de Maria Corina Machado. Miren el océano de personas que la espera al fondo. No hay palabras. Esto es impresionante. pic.twitter.com/hzKhkqozEA

— Agustín Antonetti (@agusantonetti) August 3, 2024

La movilización de este sábado ha llenado por completo una de las grandes avenidas de Caracas, en Las Mercedes, donde María Corina Machado ha irrumpido para jalear a los demócratas subida en un camión. «¡Triunfamos el 28 de julio y ahora vamos a cobrar!», apeló a través de Twitter para animar la convocatoria de protesta. «Cobrar» significa, en la singularidad lingüística del castellano venezolano, hacer valer los resultados electorales legítimos, exigir que se cumplan de forma efectiva.

«Crecemos y en familia, en cada ciudad y pueblo de este país, saldremos juntos a ratificar nuestra verdad: ¡Ganamos!», decía en el mensaje publicado en sus redes sociales pocas horas antes de esta masiva movilización que pone a las claras el aislamiento de Maduro dentro y fuera de Venezuela.  En la misma publicación, Machado denuncia que las autoridades «persiguen y secuestran a ciudadanos de bien sólo porque trabajaron en la defensa de los votos de todos».

En un mensaje posterior, la líder de la oposición pone en valor «la satisfacción de haber logrado la victoria». «Con la determinación de que nadie podrá robarnos lo que logramos. Con la confianza de que prevalecerá la verdad que el mundo entero ya reconoce. Con organización, disciplina y en paz, porque somos parte de un movimiento cívico histórico», ha resaltado.

Mientras, miles de personas permanecen a las afueras de comisarias de policía en Caracas denunciando detenciones arbitrarias de venezolanos y exigiendo noticias de sus seres queridos apresados por el régimen chavista. Familiares de quienes han sido arrestados en las ultimas horas por protestar o estar cerca de las movilizaciones que denuncian fraude electoral.