El PP consigue su objetivo: el presidente del Gobierno y el del Senado comparecen el mismo día

El presidente del Senado, Pío García-Escudero, declarará en el juicio de la primera época de la trama Gürtel el 26 de julio, el mismo día que también comparece el presidente del Gobierno Mariano Rajoy, como adelantó OKDIARIO.

Los servicios jurídicos del Partido Popular han logrado reunir el mismo día las declaraciones de Rajoy y García-Escudero. El primero lo hará a las 9.30 de la mañana, mientras que el segundo responderá ante el tribunal a partir de las 11.00 horas. El jefe del Ejecutivo pasará poco más de hora y media prestando declaración ante la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.

La coincidencia en la fecha y el hecho de que sean dos comparecencias prácticamente consecutivas minimizará, como reconocían fuentes del PP, el daño a la imagen del presidente del Gobierno entrando en los juzgados de San Fernando para responder a las preguntas de los magistrados.

Rajoy se había acogido a su derecho a declarar por escrito o por videoconferencia, tras conocerse la citación por parte del tribunal de la Gürtel. Dado que el presidente del Gobierno comparece en calidad de testigo y el juicio se encuentra en estos momentos en su fase oral, los jueces denegaron la petición de Rajoy.

Los abogados del PP han conseguido colocar las dos comparecencias el mismo día dado que, al ser Mariano Rajoy y Pío García-Escudero dos altas instituciones del Estado, la «tradición» era acordar con el tribunal la fecha de la comparecencia. Los argumentos esgrimidos por los letrados ‘populares’ para incluir a de García-Escudero el mismo día que Rajoy son que, por un lado, el tribunal ya está formado para ese día. Por el otro, que al haber terminado la actividad del Senado –faltan un par de comisiones– hasta septiembre, la disponibilidad de García-Escudero ha permitido consensuar la fecha con el tribunal.

Dos abogados acompañarán a Rajoy

El presidente del Gobierno encara su comparecencia ante el tribunal del caso Gürtel con total tranquilidad. Durante el periodo que se juzga, la primera época de la trama (1999-2005), Rajoy fue vicepresidente primero del Gobierno y ministro, por lo que poco o nada podrá explicar sobre las decisiones que se tomaban en campaña y a qué empresas contrataba el partido.

No sucede lo mismo con Pío García-Escudero. Entre noviembre de 1993 y noviembre de 2004, García-Escudero ocupó el cargo de presidente del PP de Madrid. Por tanto, él sí puede arrojar alguna luz sobre los procesos de contratación que seguían los populares en Madrid.

Rajoy acudirá a la sala de la Audiencia Nacional en San Fernando acompañado de dos letrados, aunque no es obligatorio puesto que su presencia es únicamente como testigo. Le asistirán como abogados el actual responsable de los servicios jurídicos del partido, Alberto Durán y Jesús Santos, director del área penal del bufete Baker&McKenzie.

Alberto Durán fue el responsable, según su propia declaración, de dar la orden para destruir los ordenadores del extesorero Luis Bárcenas. Pidió al responsable de informático de Génova que custodiara y después destruyera la información que contenían los discos duros de la computadora de Bárcenas.

Jesús Santos fue uno de los fiscales históricos de la Audiencia Nacional, a la que llegó en 1989 en sustitución de Carmen Tagle, asesinada por la banda terrorista ETA. Fue uno de los responsables de desarrollar la política penal antiterrorista española, y de establecer una estrecha colaboración con la justicia francesa en esta materia.

Con el respaldo de los dos abogados, Mariano Rajoy está preparando su comparecencia con una especie de método de entrenamiento, por el que los letrados le someten a más de 200 preguntas, como si de un examen se tratara, que los jueces Julio de Diego, José Ricardo de Prada y Ángel Hurtado, o las partes personadas en el juicio, puedan realizar al presidente.