El Gobierno proyecta una imagen de unidad entre Iglesias y Calviño pese a las tensiones

Pedro Sánchez quiere disimular las diferencias internas que provocan una fuerte tensión entre los dos socios del Gobierno. Por eso, este martes, tras el Consejo de Ministros han comparecido conjuntamente los vicepresidentes segundo y tercero, Pablo Iglesias y Nadia Calviño, que lideran las dos almas del Ejecutivo. Físicamente sólo les separaba la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, y tres metros. Ideológicamente mucho más. Pero antes de comparecer han enterrado el puñal y se han prometido amor eterno.

Iglesias, el primero de los dos vicepresidentes en comparecer, ha agradecido la labor de la ministra y del equipo de Economía en las medidas que impulsa su departamento. Calviño, por su parte, ha empezado su intervención dejando claro que «desde esta vicepresidencia estamos coordinando la respuesta económica por encargo del presidente».

La relación entre los dos compañeros de Gabinete está siendo tortuosa a cuenta de la crisis del coronavirus. La urgencia en aprobar medidas sociales para «no dejar a nadie atrás», dice Iglesias, pero con un dinero que el Gobierno no dispone, y que supervisa y maneja Calviño, han provocado un importante choque entre los dos ministros.

En las reuniones del Consejo de Ministros los dos vicepresidentes son los que llevan la voz cantante. El líder de Podemos defiende medidas más radicales de apoyo a los más vulnerables y la ministra gallega, con una gran experiencia en finanzas públicas, pone freno al derrochismo de los podemitas para no comprometer las cuentas del Estado a medio y largo plazo.

Pese a negarlo tanto en público como en privado las discrepancias han llevado a Calviño a valorar su salida del ejecutivo. De momento, tal como ha avanzado hoy OKDIARIO, se mantendrá a petición de Pedro Sánchez y del Partido Socialista, el que la propuso como independiente para ocupar la cartera. Fuentes cercanas al Gobierno, por eso, admiten que la relación es «complicada» y nadie se atreve a descartar que pueda explosionar.