Detractores y partidarios de los independentistas intercambian gritos en las afueras del Supremo

Los gritos de “¡libertad!” de los políticos catalanes y vecinos de Vilanova i la Geltrú desplazados a Madrid para arropar a Artur Mas y Neus Lloveras, se mezclan hoy con los de “golpistas” de los detractores al movimiento secesionista en las puertas del Tribunal Supremo.

Mientras algunos de los detractores piden en declaraciones a OKDIARIO que recaiga todo el peso de la ley sobre ellos a los que considera “delincuentes”, un vecino del municipio de donde Neus Lloveras es alcaldesa reclama la “libertad de los presos” y que se acabe la judicializacion de lo que dice es “una cuestión política”.

Un catalán del Ampurdán contrario al independentismo espera que “los políticos cumplan con lo que la mayoría de catalanes hemos querido siempre, que no es la independencia”. Según él, el discurso independentista se ha construido “a base de mentiras” y lamenta que “los corruptos y totalitarios se quejen de tener que cumplir la ley”.

Un vecino de Vilanova que ha viajado este martes hasta Madrid cree que los investigados “están aquí por motivos políticos” recordando que “estamos aquí sin gritar, sin amenazar, con calma”. El hombre, con lazo y bufanda amarillos y un collar con la estelada dice que “no confío” en Llarena al que acusa de “marioneta del poder”.

Hasta las puertas del Supremo, aprovechando la presencia de números medios de comunicación, también se ha acercado un detractor del Partido Comunista Chino al que acusa de “genocida”.