Un artículo del candidato Manuel Valero cae como una bomba en las elecciones del ICAM

La candidatura encabezada por el vicedecano del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid, Manuel Valero, ha sacudido con mucha virulencia las ya polémicas elecciones del ICAM fijadas para el próximo 13 de diciembre.

En un artículo titulado «Los colegiados del ICAM deben saber…» compartido a través de las redes sociales y el whatsapp,Valero desvela una serie de acusaciones contra la decana Sonia Gumpert y la candidatura actual que encabeza Javier Íscar.

Manuel Valero comienza dicho artículo hablando sobre el cargo de tesorero que desempeñó en el Ilustre Colegio de abogados de Madrid: «Deben saber que su Tesorero fue desposeído de todas sus funciones y competencias estatutarias por vía de hecho, no por acuerdo de la Junta de Gobierno, asumiendo la administración del patrimonio colegial el órgano de gobierno, de modo que a partir del año 2014 el tesorero se negó a firmar las cuentas anuales y presupuestos, para no incurrir en responsabilidades, ya que su conocimiento previo de las propuestas económicas las conocía 48 horas antes, por el Orden del Día, distribuyendo la Sra. Decana esos asuntos entre otros diputados/as a su conveniencia y antojo».

«Deben saber que esa desposesión», añade, «ha hecho posible que la Junta de Gobierno de la Sra. Gumpert, avalada por todos/as los/as diputados/as, siempre con amplia mayoría, realizaran durante estos 5 años una gestión del patrimonio del Colegio desastrosa, derrochadora, de favoritismo y ruinosa, no con la pasividad del tesorero que ha dejado por escrito constancia en las actas de sus votos negativos, sus abstenciones, sus protestas y quejas».

Valero afirma que «nada más tomar posesión se encargó una auditoría que costó 163.834 euros y que no sirvió para nada pues lo guardó la decana en un cajón, sin apenas aplicación de sus recomendaciones» y que «estando obligada a ejecutar los acuerdos de la Junta General Extraordinaria del 7/11/2011, que transmitía el Servicio Médico/Icam a la Mutua Sanitaria, lo retrasó hasta el 30/5/2014», lo que supuso cargar con «un déficit de 521.564 euros del Servicio Médico y de 264.409 euros por 3 informes/dictámenes innecesarios, es decir, se malgastaron 785.973 euros».

«Para instrumentar el voto electrónico», sostiene, «se gastaron 44.360 euros y todavía en estas elecciones del 13 de diciembre no se cuenta con este recurso democrático de participación». Además, durante este mandato, dice, «se ha despedido a 27 empleados, cuyas indemnizaciones han costado al Colegio 4.336.928 euros, contratándose a 19 nuevos empleados, aumentando en 22.380 euros este capítulo de las cuentas anuales, siendo el diputado y ahora candidato Javier Íscar el encargado de proponer los despidos y las mejoras de sueldo de empleados directivos».

En actividades internacionales, viajes de miembros de la Junta de Gobierno y subvenciones a organismos extranjeros, indica que «el Colegio se ha gastado en 4 años 146.645 euros, es decir, 124.674 euros más que en 2012» y que en ese año, «el Colegio ha recortado 977.635 euros en el concepto de Prestaciones Asistenciales».

Además, señala que la Comisión de Defensa de la Competencia del Ministerio de Economía ha impuesto al Colegio «sendas multas con un importe global de 639.024 euros» y que «la gestión manirrota del patrimonio colegial ha supuesto en 4 años el derroche de 10.961.772 euros».

«Por todo ello», dice Valero, en referencia a varias candidaturas «el colegiado debe saber y ser consciente de que consintieron con su voto tamaña forma infausta de gobernar NUESTRO Colegio, careciendo de todo crédito moral, por lo que confiar en las promesas electorales que hacen las dichas candidaturas se podría traducir en apoyo y aval continuista de esa política fatídica».

«Debe saber que sanear y regenerar NUESTRO Colegio supone instaurar la democracia integral, la participación, la integración de todos los colegiados en la vida orgánica y en una gestión rigurosamente austera, eliminando gastos suntuarios e innecesarios, desterrando que sea un feudo de unos pocos predilectos, implantando la total transparencia, construyendo un Colegio DE y PARA todos los colegiados, un Colegio que defienda la profesión en todos los ámbitos, el Turno de Oficio, la Dignidad de la Abogacía y el Estado de Derecho», concluye el candidato.