El IEE confía en la fortaleza de España y avanza un crecimiento económico del 3,3% para este año

El Instituto de Estudios Económicos (IEE) se ha sumado al conjunto de organismo públicos y privados que dan por hecho que la economía española volverá a crecer por encima del 3% este año. En concreto, este think tank considera que el Producto Interior Bruto (PIB) repuntará un 3,3% en 2017, seis décimas por encima de la previsión oficial del Gobierno que el ministro de Economía, Luis de Guindos, revisará al alza de cara a la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2018

El IEE apunta en su informe semestral Coyuntura Económica publicado este miércoles que el próximo año la economía española experimentará una ligera desaceleración, con un avance del PIB del 2,7%, lo que supone dos décimas por encima de la previsión incluida en el último cuadro macroeconómico elaborado por el Gobierno.

Por lo que respecta al mercado laboral, el organismo considera que la tasa de paro se reducirá hasta el 17% de la población activa al cierre del ejercicio gracias a la creación de 550.000 empleos netos, para caer hasta el 15% en 2018 con la generación de 429.700 puestos de trabajo. Esto implica que el empleo repuntará un 3,1% en 2017 y el 2,4% el próximo año.

El presidente del IEE, José Luis Feito, ha indicado que la fortaleza de la economía española se fundamenta en las reformas estructurales aprobadas por el Ejecutivo en los últimos años, entre las que destaca la laboral, unas modificaciones normativas que «han sido decisivas» para apuntalar el crecimiento y que no pueden derogarse, como solicitan PSOE, Podemos y los sindicatos CCOO y UGT.

«La reforma laboral ha hecho conciliar la creación de empleo con el mantenimiento y la ganancia de competitividad», ha declarado Feito, que ha citado también la apuesta por la recuperación del equilibrio presupuestario y la estabilización de la deuda como factores fundamentales de la mejora económica. Con estas res reformas ha asegurado que en los próximos meses se producirán revisiones al alza de la nota que dan a España las agencias de calificación crediticia.

«La actual situación política, con complejos equilibrios, hace que se torne difícil una nueva dinámica reformista como la experimentada durante la anterior Legislatura. Debemos ser conscientes de que las medidas adoptadas en los últimos años han tenido como consecuencia un crecimiento de nuestra economía más robusto y sostenible, con una participación positiva de todos los componentes del PIB tanto de la demanda interna como del sector exterior», indica el informe.

A estos elementos internos se suman los vientos de cola derivados del crecimiento del comercio internacional, la situación de aterrizaje suave de China, los bajos precios del petróleo y los tipos de interés en mínimos históricos, así como la buena evolución de países emergentes de Latinoamérica, India y Rusia.

Feito también ha señalado que otro factor positivo es que de momento no se ha materializado el riesgo de una escalada de proteccionismo por parte de la nueva Administración de Donald Trump en Estados Unidos el mayor avance del previsto por parte de las exportaciones españolas.

El presidente del IEE ha realizado como conclusión un aviso a navegantes: que cualquier revisión de las políticas adoptadas o cualquier incumplimiento con el objetivo de la consolidación presupuestaria pactado con Bruselas aumentará la incertidumbre y empeorará las perspectivas de la economía española.

«Aunque las reformas adoptadas han reducido nuestra vulnerabilidad, debemos seguir comprometidos con la reducción de los desequilibrios, comenzando por la consolidación presupuestaria de las cuentas públicas. Cualquier contrarreforma o incumplimiento de nuestro compromiso con el Pacto de Estabilidad y Crecimiento ocasionaría un incremento de la incertidumbre, con su impacto negativo sobre el crecimiento potencial y la generación de empleo», señala el informe.

Precisamente, en materia de cuentas públicas el IEE cree que España logrará reducir el déficit público hasta el 3,1% del PIB este año a pesar de que supondrá un enorme esfuerzo para los hogares y las empresas, ya que en 2016 la brecha fiscal fue del 4,5% del PIB (incluyendo las ayudas financieras) y, por lo tanto, el ajuste superará los 15.000 millones de euros.

En cuanto a la evolución de los precios, la institución espera que este ejercicio la inflación media anual sea del 2,2%, lo que supone un avance de siete décimas respecto a su anterior previsión, para rebajarse a una tasa del 1,9% en 2018.