Consultora china Veline Ong avisa: contenedores que llegaban a España en Navidad no lo harán hasta julio

• Andrés Dulanto @AdsDulantoScott
• Redactor Jefe responsable del Departamento de Economía en OkDiario, después de haber trabajado y colaborado con distintos medios, en grandes empresas y en agencias de Información y de Comunicación. Más de 25 años informando de la actualidad en diferentes secciones y desde varias ciudades para EFE, especialmente concentrado en Economía y Contenidos Digitales. Ex miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Periodistas de Información Económica APIE.
• • 18/10/2021 06:45
  • Actualizado: 18/10/2021 09:42

La consejera delegada de la consultora Asian Warrior, Veline Ong, alerta de la escasez de materiales y productos -como ropa, muebles, juguetes o repuestos industriales- que llegarán a los puertos españoles desde China los próximos meses, así como de que muchos de los contenedores que se esperan para esta Navidad sufrirán retrasos de “seis a ocho meses. Incluso más”.

En una entrevista con OKDIARIO, Ong explica que, tras la crisis provocada por la pandemia del coronavirus, existe un “colapso portuario” en China, «al haberse acumulado los pedidos que no se podían enviar por motivos de salud», y “existir un rebrote por el virus indio que ha hecho que muchos trabajadores estén de baja”, junto a las paradas en la producción en multitud de fábricas “para evitar el calentamiento global”.

Además, la «falta de energía y los paros» decretados por el gobierno hacen que muchas fábricas que producen artículos y piezas industriales sólo operen una semana al mes, a lo que se une la falta de contenedores y el encarecimiento de ellos (han multiplicado por cuatro su precio en muchos casos). Esta situación se agrava al ser China el mayor fabricante de contenedores del mundo y haber reducido su producción.

“Lo que ha pasado con los semiconductores pasa ahora con otros materiales”, se trata de “una situación que va a durar hasta el año que viene. Hasta junio o julio”, o incluso más tarde, explica.

“Es un largo proceso porque después de todo lo que pasó durante la pandemia, la actividad portuaria ha estado colapsada. Hay muchos pedidos y no se podían enviar por temas sanitarios. Se están acumulando muchísimas cosas en los puertos y también está la situación del rebrote del virus indio. Lo que ha afectado a muchas personas que trabaja en los puertos y ha hecho que estén de baja”. “Todo esto baja la productividad. Las cosas se atrasan y además han subido los precios”.

«Se encarga mucho más de lo que tenemos». Además, “la mayoría de los fabricantes de contenedores están en China” y la fabricación se ha reducido.

“Ha habido paros en las fábricas a partir de junio. En un año en el que ha habido escasez de suministro de energía en China por varias razones”. “Nuestro presidente, XI Jinping, declaró delante de la ONU su compromiso con intentar reducir la emisión de carbono para que no se contaminara tanto el medio ambiente”. “Se apoyará al ciento por ciento el impulso a la energía verde y así evitar todo lo que está pasando con el calentamiento global”.

Por este motivo “ahora mismo en el sureste de China se producen apagones en residencias y en muchísimas industrias, lo que hace que muchos fabricantes estén cortando la producción”. “Tienen que esperar su turno. Es un bajón en la producción en China que empezó con la pandemia y ha aumentado desde agosto de este año, y septiembre”.

“Ahora hay un calendario. El coste de energía ahora mismo es muy alto, queda poco carbón y la electricidad está muy cara. Por lo que las empresas están tomando turnos para fabricar” y se producen retrasos “de todos los pedidos” del exterior.

A esto hay que añadir la subida del precio de los contenedores. “Si costaban 1.500 o 1.800 euros, ahora, como mínimo, 8.000 o más. Alguno llega hasta los 15.000 euros”.

La inversión de Asia en occidente se ha frenado

Ong considera que, a pesar de que la pandemia ha provocado que la mayoría de las inversiones asiáticas en España “esté en pausa”, “una vez que se estabilice la situación, todo volverá”.

“Somos un grupo especializado de consultoría, relaciones comerciales y de inversión entre China y el resto de países. Como estamos afincados en España, dedicamos mucho más tiempo a la inversión entre China y España. Tanto trayendo inversores para invertir en los proyectos interesantes de aquí, como llevando empresas españolas para que pueda trabajar en China”.

“Los inversores y compañías chinas se sienten atraídas por muchas cosas de España”.

“Cualquier proyecto relacionado con el turismo interesa. Antes de la pandemia estuvimos negociando cerrar un proyecto de 30 edificios en España para luego convertirlos en apartamentos turísticos. Desgraciadamente se cayó con el virus y hemos tenido que suspender. El año que viene vamos a volver otra vez a negociar. También interesa la restauración y los asuntos relacionados con la salud y los hospitales, o las telecomunicaciones”.

«Por el virus las fronteras están cerradas. La mayoría de los inversores se quedan en su país y no tenemos movilidad para ir a ver un activo, o varios activos. Necesitamos estar in situ para enseñar las cosas». «Por este motivo todo está muy colapsado». «Pero los inversores, en este momento, están esperando para retomar proyectos cuando la situación se vuelva a recuperar un poco».

La inversión china volverá. “Se dice que si hay crisis hay oportunidades. Y se tiene un mejor precio, claro”.

Por su parte, “la economía china se está recuperando. Tenemos que dar las gracias al gobierno chino. Ha hecho una gestión muy buena durante la pandemia” y, además, ha habido relativamente poca incidencia con “1.400 millones de habitantes en China”. “No se ha desmadrado” gracias a que ante estas situaciones “todos los chinos se unen como uno”. “Cuando el gobierno dice que tenemos que seguir este protocolo, todos los ciudadanos chinos lo siguen”. Por eso, en este caso, “China frenó rápidamente el virus”, pero “después llegó un brote de India. Hay casos especiales porque ha venido gente de fuera. Pero dentro de China está bastante controlado”.

De hecho, “las empresas españolas tienen también una oportunidad en China”. “Si una empresa quiere trabajar y quiere invertir en China tiene opciones. Si tiene capital ciento por ciento español puede montar una empresa por su cuenta. Pero si quiere pedir un préstamo, o la ayuda que sea, sí que necesita tener un socio local, o dos, o tres. Con uno ya puede tener, por ejemplo, un aval de préstamo”. Sin embargo, “ahora, con el virus y cómo nos ha cambiado la vida, es mucho más difícil, entrar en China”.

Este escario de recuperación es un buen momento “para prepararse mejor para entrar en China”. “Si quieres trabaja con una empresa china, es importante de conocer su cultura. Es conveniente aprender chino. No digo que tiene que ser a nivel profesional, o nativo, pero por lo menos que se pueda comunicar bien con ellos en las negociaciones. Eso abre la puerta porque los chinos, los empresarios sobre todo, aprecian mucho que las persona que tienen intención de trabajar con ellos dediquen un poquito de su tiempo para aprender el idioma”. “Por eso nuestra empresa tenemos también esos servicios de enseñanza para favorecer las relaciones comerciales”.

España, “demasiado papeleo”

Sin embargo, España necesita simplificar los procesos administrativos para atraer la inversión extranjera. “Los inversores ven el gran problema del papeleo, de la burocracia. Cuando un grupo inversor, o un inversor individual, quiere invertir algo en el extranjero, lo que quiere es que tenga un proceso muy fluido”.

“Lo que pasa es que aquí, en España, entiendo también que por la normativa nueva y las legislaciones, existe demasiado papeleo”. “Antes de hacer una inversión hay muchísimos requisitos, papeleos,… y más papeleos”. «Llegan muchos inversores, pero se cansan. Se cansan porque ven todo el papeleo a hacen. Muchos obstáculos que al final hacen que se vayan a otro país para invertir».