Vinicius ilusiona en su debut

Vinicius Junior debutó con el Real Madrid ante el Manchester United en el primer partido de la pretemporada. Los hombres de Lopetegui se estrenaban en la International Champions Cup frente a la escuadra dirigida por Mourinho y el brasileño era una de las principales atracciones en un partido que reunió todos los cánones que debe recoger un encuentro preparatorio de verano. Más si cabe, si es el primero tras una veintena de entrenamientos donde las piernas están tremendamente cargadas.

Pero centrándonos en el encuentro de Vinicius, hay que decir que el brasileño dejó destellos de su calidad ante un United que le pegó una patada en la primera pelota que tocó. Darmian fue el encargado de marcar el territorio. El joven de 18 años comenzó el encuentro algo tímido. No era para menos. Por primera vez en su corta carrera se ponía en un partido la camiseta del 13 veces campeón de Europa. Pero en cuanto los minutos comenzaron a pasar, el atacante empezó a soltarse. Un amago, un pase, un cambio de juego y su sello personal.

No se había cumplido el minuto 25 cuando Vinicius recibía un balón en la banda izquierda, encaraba, rompía a Mensah con una gran bicicleta y centraba al primer palo. A su espectacular acción sólo le faltó que Bale hubiese introducido la pelota en la portería defendida por David de Gea, pero su disparo se marchó desviado.

Tras el descanso, Lopetegui le mantuvo de titular y el mantuvo su nivel. No se dejó de ofrecer, ayudó en tareas defensivas y fue el hombre más importante en el frente ofensivo. También, como en la primera mitad, se llevó alguna entrada más dura de lo normal para un partido de pretemporada. Finalmente, cuando se cumplía una hora de partido, Lopetegui decidía sustituirle.

La puesta de largo de Vinicius estuvo a la altura de las expectativas. Junto con un Ceballos omnipresente y un Odriozola que demostró ser un puñal en la banda derecha, fue el mejor del Real Madrid en la primera mitad. Por ambas bandas, derecha e izquierda, lució y dejó detalles impropios de su edad -especialmente por el flanco zurdo-, demostrando que está mucho más cerca de los mayores que de los jóvenes.