Verstappen remonta para ganar en Spa y un genial Alonso acaba quinto

Max Verstappen sumó su octava victoria seguida en el Gran Premio de Bélgica después de remontar desde la sexta posición en una carrera que volvió a ganar con pocas dificultades. El campeón holandés acabó por delante de su compañero Checo Pérez y Leclerc, que completaron el podio. Alonso acabó quinto tras remontar desde la novena posición después de una espectacular salida. Sainz abandonó tras tocarse con Piatri en la primera curva y aguantar 24 vueltas.

La carrera del domingo llegó después de un sábado pasado por agua donde dominó Max Verstappen con algo de incertidumbre. Un gran Piastri apretó las tuercas al Red Bull y el campeón holandés necesitó de su mejor versión para mantener su dictadura en una carrera al sprint que fue más sprint que nunca por la tromba de agua que cayó sobre el circuito minutos antes de la carrera. Ya con el sol fuera y la pista empapada, Carlos Sainz volvió a dejar buenas sensaciones con un cuarto puesto y Alonso certificó su día de cumpleaños menos feliz de los últimos años.

Aston Martin llegó a Bélgica después de varias carreras de hastío y en Spa además todas las partes tomaron malas decisiones. Primero fue la del equipo en clasificación cuando mandó a salir a Stroll con medios sobre el trazado mojado y por la tarde Alonso, que tuvo que abandonar la carrera al sprint tras hacer un trompo e irse a la grava. Cuando tus errores se pueden contar con los dedos de una mano en 20 años de carrera todo es perdonable. La carrera iba a ser otra cosa… aunque en Aston Martin no habían grandes expectativas.

Fernando Alonso salía desde la novena posición, Sainz desde la cuarta y Verstappen sexto en una salida con grandes expectativas. La sanción al holandés por cambiar la caja de cambios iba a poner en Bélgica fin a la monotonía de las últimas carreras. Por lo menos ya se aseguraba que esto no iba a ser un paseo de principio a fin de Red Bull.

Alonso hace magia

Pero en la salida el protagonista fue un Fernando Alonso que volvió a hacer magia. Como en antaño y en los últimos meses. El asturiano adelantó tres puestos en unos primeros metro espectaculares para situarse en la sexta posición, una por detrás de Sainz que perdió una. Verstappen adelantó hasta el cuarto puesto y amenazaba el primer lugar de Checo Pérez. Piastri, que había realizado un fin de semana perfecto en Spa, se quedó fuera a las primeras de cambio tras sufrir daños en su coche tras ser cerrado por Sainz en la primera curva.

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No se habían llegado a las cinco vueltas y Alonso ya había adelantado a un Carlos Sainz que finalizó la salida con daños en los laterales de su Ferrari por su toque con el McLaren de Piastri. Después de un sábado dramático, su compañero Stroll también estaba sexto así que los males para Aston Martin eran menos.

El primer enemigo a la vista para Alonso era Hamilton porque Verstappen volvió a demostrar que juega en otra liga. El holandés impuso un ritmo demoledor y a las 10 vueltas ya estaba en segunda posición sólo por detrás de su compañero Checo Pérez. El campeón del mundo sólo había tardado unos minutos en apañar la sanción por cambiar la caja de cambios. La vida es más fácil si pilotas un Red Bull… y además eres el mejor piloto que ha habido en la parrilla en los últimos años.

La amenaza lluvia queda en nada

Y en la vuelta 19 comenzó a llover. Con Verstappen a un segundo de Checo Pérez la lluvia comenzó a aparecer por el circuito de Spa y aumentaba la incertidumbre en la parrilla. La carrera podía cambiar en poco segundos. Y Alonso estaba en un quinta posición con las garras bien afiladas.

A todo esto, Verstappen ya caminaba en la primera posición camino a otra victoria… salvo que la lluvia dijera lo contrario. Y no lo dijo. El de Red Bull convirtió la últimas vueltas del Gran Premio de Bélgica en una monotonía y acabó sumando su octava victoria consecutiva en Spa. Fernando Alonso arregló su mal sábado con un quinto puesto que adquiere mérito después de salir desde la novena posición. Carlos Sainz resistió pero tuvo que abandonar después de tocarse en la salida. El próximo capítulo, a final de verano en Holanda.