Último tren para James

James Rodríguez no se rinde. Pese a pasar a tener un papel secundario en el conjunto blanco con la llegada de Benítez y no salir de él en las dos últimas temporadas, el colombiano quiere aferrarse al blanco y demostrar a Zidane y a la propia directiva que su deseo es quedarse en el Real Madrid.

Atrás quedaron los tiempos convulsos en los que el ’10’ madridista ponía en duda su continuidad tras el Mundial de Clubes. Se convenció a sí mismo y luchó por hacerse un hueco en un equipo en el que, para nada, está fácil entrar. Más aún teniendo como compañeros a Isco y Asensio.

El colombiano se ha visto eclipsado por las dos perlas españolas que han empañado sus grandes actuaciones en los últimos meses y han acaparado todos los focos. Pero James es un guerrero. Y no deben caer en el olvido los dos goles al Deportivo que hicieron posible la victoria madridista el día en que Isco maravilló a todos con una clase magistral de fútbol. Tampoco el gol que puso las tablas en el Bernabéu frente al Barça y que le hubiera dado más de media Liga al Madrid si no llega a aparecer Messi en la última jugada del partido.

Aún con un pie fuera del conjunto madridista la próxima temporada, James sigue intentando hacer valer los 80 millones que en su día se pagó al Mónaco por él. Desde que Zidane pusiera en marcha su ‘equipo B’ haciendo rotar a más de medio equipo frente al Eibar, el cafetero siempre ha cuajado grandes choques, siendo tras Morata el segundo máximo goleador en estos partidos. Todo ello sin ser precisamente el que más minutos ha disputado de la plantilla.

Y es que el colombiano acumula un total de nueve goles y 12 asistencias. Lo que le convierte en el centrocampista más productivo del conjunto blanco y de la Liga, siendo el que menos minutos ha estado sobre el césped. Algo que ha llamado la atención de los grandes clubes europeos -como de la Juventus-, sabedores de que el Madrid a final de temporada no tendría impedimento en dejarle marchar, si llega una oferta suculenta.

De todos modos, él sigue fijado en su deseo de no salir del Bernabéu. Motivo suficiente por el que seguir trabajando y dejando buenas impresiones cada vez que Zizou le de la oportunidad de demostrarlo. Ante el Granada dispondrá de otra baza. Son seis -siempre y cuando el Madrid llegue a Cardiff- las que le quedan para convencer y ganarse un billete en la escuadra blanca para 2018.