Mundial de Clubes 2025

Trump mete en un lío a la Juve con los deportistas trans: «¿Podría jugar esa mujer en vuestro equipo?»

El presidente de Estados Unidos sigue en su cruzada contra el deporte trans

Donald Trump despliega al ICE en unas medidas de seguridad nunca antes vistas en un torneo de fútbol

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Donald Trump conversa con la plantilla de la Juventus. (Getty)
Francisco Rabadán
  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

Donald Trump recibió a la plantilla de la Juventus en el despacho oval y metió en un lío a los jugadores de la entidad italiana. El presidente estadounidense no se cortó ni un pelo a la hora de preguntarles si veían posible que una mujer transexual jugase en su equipo provocando que los dirigentes tomasen la palabra antes que la cosa fuese a mayores. «Tenemos un equipo femenino, presidente», le espetó el director deportivo Damien Comolli para salir de la situación. «Pero, ¿deberían poder jugar con su equipo?», les volvió a espetar ante el silencio de sus interlocutores a la siguiente cuestión.

El máximo responsable de la administración norteamericana está aprovechando para hacer diversos encuentros con los equipos que participan en el Mundial de Clubes y con la Juventus tenía especiales intereses al ser su dueño John Elkann, famoso empresario dueño del conglomerado de automóviles Stellantis (Fiat, Peugeut, Citröen, Opel y un largo etcétera).

Trump, casi sin venir a cuenta, les preguntó a los jugadores de la Juventus si «¿ustedes harían jugar a mujeres transexuales en su equipo?» en una pregunta que descolocó a todos los presentes. Fue ahí cuando Comolli salió al rescate con el equipo femenino ante el silencio de los presentes. Finalmente, el presidente quiso zanjar el tema a su manera: «Claro, ¡y me imagino que no las harían jugar con ustedes! Bueno, veo que son diplomáticos…», añadió.

El empresario está en una lucha contra la injusticia que a sus ojos supone que los deportistas trans compitan en competiciones femeninas. «Sacaremos a los hombres del deporte femenino», es uno de sus mantras. Trump, de hecho, ya ha solicitado a la Universidad Pensilvania que retire los premios a la nadadora trans Lia Thomas al considerarlo completamente injusto.

Por supuesto, que si está en las manos del presidente la campeona olímpica de boxeo de menos de 66 kilos, Imane Khelif, no podrá intentar revalidar su título en Los Ángeles 2028. «Me parece profundamente injusto y falso todo lo que rodea al deporte trans. Sólo hay dos sexos», proclama un Trump que metió el dedo en el ojo a la Juventus.

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