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El Liverpool de Klopp deja a Mourinho con un pie en la calle

  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

José Mourinho continúa sin tocar fondo con el Chelsea esta temporada. El equipo londinense cosechó su sexta derrota (1-3) en la Premier League y ya luchan por evitar entrar en puestos de descenso. El Liverpool de Klopp consiguió un triunfo que reafirma al técnico en su idea radicalmente opuesta a la liga inglesa apostando por el toque de balón y un falso nueve como Coutinho. La apuesta le salió de perlas al alemán.

El Chelsea se adelantó en el marcador muy pronto con un tanto de Ramires tras centro de Azpilicueta. Mourinho se había cargado del once titular a Cesc y Matic para dar entrada a un doble pivote de picapedreros: el brasileño y Obi Mikel. Esos cambios de corte defensivo permitieron pronto a los visitantes dominar la posesión del balón y comenzar a arrinconar a un tacaño Chelsea. El premio llegó al borde del descanso con un zapatazo de Coutinho.

En el descanso la lectura de los técnicos fue fundamental para el devenir del choque. Mou se cargaba a la estrella Hazard, con quien cada día empeora su relación; mientras que Klopp introdujo a un delantero como Benteke. El ex técnico del Real Madrid se volvió loco con el árbitro cuando éste perdonó la segunda amarilla a Lucas Leiva.

Tras el show del portugués, llegaron los goles decisivos. Cahill y Terry fueron un coladero primero para Coutinho y después para Benteke. Los fallos de sus centrales pusieron dos clavos más en el ataúd de The Special One, que acabó el partido con un sector del estadio vitoreando nuevamente su nombre. El público es soberano, pero la decisión final la tomará un Roman Abramovich al que se le acaba la paciencia.